La forma del agua

tareixa taboada OURENSE

OURENSE CIUDAD

MIGUEL VILLAR

Fernando Sacó expone sus fotografías en el Espacio de Arte de la tienda de Roberto Verino en Ourense

16 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«La vida es una buena foto en blanco y negro. Hay blanco, hay negro y un montón de sombras en medio». Karl Heiner.

Agua es el título de la exposición formada por 21 imágenes de paisajes y enclaves de Galicia modelados por el agua que el fotógrafo Fernando Sacó exhibe en el Espacio de Arte Roberto Verino. El famoso diseñador verinés, sensible al arte contemporáneo y su promoción, da cabida en el emplazamiento de la tienda de la calle del Paseo a la libre expresión de las manifestaciones plásticas en toda su extensión.

Los paisajes que Fernando Sacó traduce en fotos tienen el aura de lo «sublime» como categoría estética que el griego Longino definió como la capacidad de conducir al espectador a un éxtasis o catarsis a través de la perfección de la obra de arte. Vocablo paradigmático del XVIII propio del paisajismo alemán e inglés y primer Romanticismo, con un sentido más estético que retórico, y que desde la filosofía Kantiana se interpreta como infinitud y suspensión. En Los placeres de la imaginación, Joseph Addison además de la sublimidad y belleza creó una nueva categoría, «lo pintoresco» o estímulo visual, que aporta la evocación de lo atemporal y aparece en el panteísmo violento del Sturm und drang de Schopenhauer.

Lo sublime y lo pintoresco se fusionan en las imágenes que Sacó nos brinda como una ensoñación, en las iluminaciones y difuminos, y un estilo que aunque personal, deja una impronta propia del estilo romántico cultivado por Ansel Adams y revisado.

Fernando Sacó presta especial atención a la composición y extrema al detalle y -aún a pesar de interesarse por la fotografía directa- introduce cierta artificiosidad controlada añadiendo al paisaje efectos sensoriales en un post procesado digital. Fotógrafos como John Pfahl y Jerry Uelsmann son referentes en este estilo manipulativo.

Elige para sus sugerentes paisajes las luces del amanecer y del crepúsculo, los primeros albores del día y el momento «entre lusco e fusco» que despide el día y raya el anochecer. Por eso, y para crear en la imagen una atmósfera llena de misterio y magia, Fernando huye de las intensas luces del mediodía, cuya potencia genera fuertes contrastes y resta textura.

Cabe destacar la manera en la que consigue, a través del encuadre y la composición, la imagen sorprendente, como una sinestesia de estímulos. Aproxima o aleja el fondo, jugando con bajar la línea de horizonte y convirtiendo en protagonista al cielo acuoso o la traza mediana y limpia como un corte, como un eje simétrico de una composición que se invierte en su reflejo, de la misma manera que sube el suelo para elevar el horizonte utilizando un elemento de referencia para el primer plano que proyecta profundidad a la imagen.

Para enfocar establece diafragma cerrado: F8, F11 o F16, ya que valores superiores generarían una desviación de los rayos luminosos al atravesar el objetivo (difracción) en exposiciones largas, e ISO bajo o ISO nativo en exposiciones prolongadas en las que hace del agua o las nubes protagonistas de la escena.

Sacó encuentra la imagen plástica de los fenómenos meteorológicos, la emoción del paisaje de Marsel Van Oosten, el procesado atmosférico de Marc Adamus o Scott Mc Cook, y el impacto expresivo de Ryan Dyar en su estilo glow de parajes deshabitados, sombras frías y crepúsculos ardientes.

El artista se reinventa sumiéndonos en un espacio lleno de fantasía en sus escenarios surrealistas de parajes gallegos y encuadres impactantes. En su manera de interpretar el mundo como territorio e imagen. Cartografía de conceptos hechos forma, valor y representación. Ficciones con base real, paradoja. La imagen que parte del paisaje real y se transforma en otro. Un paisaje falseado, edificado, conceptualizado, sentido, interpretado. Un paisaje construido a través de la mirada.

Anatomía de los pequeños instantes en una fotografía táctil, profusa de atmósferas fantásticas y visionarias frente al verismo documental. Lo extraño se oculta tras las brumas, la grisalla de las nubes como armazón arquitectónico e invisible barrera abstracta donde los elementos objetivos se disuelven como las pulsiones del subconsciente en construcciones atemporales, paisajes vacíos de presencia humana, puentes intemporales testigos de huellas de pasos silenciosos y el agua como protagonista de la exposición.

Sacó forma parte del proyecto Google Street View, presentación de Google Maps y Google Earth, que proporciona panorámicas a nivel de calle, permitiendo ver las ciudades seleccionadas y sus áreas metropolitanas.