Reprenden al Concello de Ourense por dar un permiso de paternidad durante una baja por enfermedad

La Voz OURENSE / LA VOZ

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El juez resalta el interés de recién nacido, que exige dedicación exclusiva e integral en plenas condiciones de salud del progenitor

22 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Una cosa es un permiso de paternidad y otra, muy diferente, es una baja laboral. Tienen finalidades diferentes, como el juez acaba de recordar a la asesoría jurídica del Concello de Ourense, en una sentencia que anula una decisión municipal de conceder el permiso durante una baja.

Si un trabajador, en este caso un policía local de Ourense, sufre una hernia discal que lo incapacita para sus labores profesionales, no puede el Concello de Ourense incluirle las cinco semanas de permiso de paternidad durante los meses que estuvo de baja. Lo privaron de ese derecho y una sentencia del Juzgado de lo Contencioso Administrativo número 1 de Ourense acaba de anular la decisión municipal y dar la razón al funcionario.

Compara el juez, Francisco de Cominges, el caso con el de una baja en período de vacaciones. El derecho a recuperar los días de descanso no se discute. Es algo que está sobradamente declarado. Pues bien, «con mayor motivo habrá de poder hacerlo el padre que padece la baja médica poco antes del parto».

Ya no solo está en juego el interés del trabajador, como en el caso de las vacaciones, «sino sobre todo el del recién nacido, que necesita la dedicación exclusiva e integral -en buen estado y plenas condiciones de salud- de su progenitor, titular del permiso».

El trabajador había pedido al Concello de Ourense que le permitieran retrasar el permiso de paternidad, dada «su imposibilidad física de atender a la criatura recién nacida (y a su madre) por causas totalmente ajenas a su voluntad». La finalidad de un baja médica es la recuperación de las lesiones, dice el juez, mientras que la del permiso de paternidad es el bienestar del recién nacido. «Son cualitativamente distintas, no se solapan», según la tesis defendida por el letrado Miguel García, en contra de la posición municipal.

Seis días antes del parto

El policía había empezado su baja el pasado 17 de noviembre. Su hija nació seis días después. Pidió entonces el permiso para el momento de reincorporación, pero el Concello se lo concedió desde el 23 de noviembre hasta el 22 de diciembre, estando de baja. El juez desautoriza la decisión municipal, aunque libera al Concello de Ourense del pago de las costas, pues, según dice, hay escasez de precedentes jurisdiccionales.

La administración había comunicado al trabajador el permiso desde el mismo día del nacimiento de la hija, sin haber atendido la petición de que se lo dieran «en el momento que cesen las circunstancias de baja laboral y le sea concedida el alta médica». La definitiva notificación al policía se la envió el Concello de Ourense el 11 de enero, cuando ya había transcurrido el mes que ahora podrá disfrutar.

La sentencia deja claro que no se pueden solapar las dos situaciones,

al ser diferentes