Los representantes de los trabajadores afirman que vuelven a acumularse pacientes en el área de urgencias
16 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Las protestas por las camas del CHUO han arreciado en las últimas semanas. Los sindicatos afirman que se mantiene a los pacientes en espacios intermedios por no abrir más y la dirección afirma que el centro está al 100 % pero que se abren todas las que se necesitan adicionalmente.
¿Qué argumentan los trabajadores?
La Comisión de Centro del CHUO, en la que están los sindicatos que representan a los trabajadores, volvía a concentrarse ayer para protestar por la acumulación de pacientes con orden de ingreso en salas del área de Urgencias a la espera de ser trasladados a las plantas del hospital donde están las unidades con las habitaciones que, por su patología, les correspondería. Critican que la dirección no abra más unidades para evitar que permanezcan «horas e días» en las llamadas zonas de tránsito, en las que los pacientes se encuentran «hacinados» en salas con hasta una veintena de camas compartiendo baños y que les resta privacidad y la comodidad que tendrían en una habitación, tanto a ellos como a sus familiares. A ello suman las dificultades para realizar su trabajo en buenas condiciones, lo que, dicen, supone un riesgo y una merma en la calidad del servicio asistencial.
¿Cuál es la explicación de la dirección?
Además de insistir en que la calidad asistencial está garantizada, aseguran que no hay camas cerradas, ya que el hospital está al 100 % de su capacidad y además se habilitan nuevas habitaciones cuando la demanda así lo requiere. Cabe matizar que, cuando se habla del 100 % de capacidad, se refieren a la cifra de camas que se asignan a cada unidad de los distintos servicios (o especialidades) médicas. Estas son las llamadas camas estructurales, las que en teoría se consignan teniendo en cuenta la media anual de ocupación de un hospital. Sin embargo cuando suceden temporadas de picos de demanda, como ocurre cuando llega la gripe, se abren más habitaciones si hay espacio físico disponible para ello o se meten más camas en cada habitación. Esas nuevas zonas de hospitalización se conocen como áreas de expansión.
¿Hay espacio libre en el complejo hospitalario?
Físicamente lo hay porque con la apertura del nuevo edificio de hospitalización han quedado espacios vacíos en los otros tres edificios que conforman el complejo y es ahí dónde se están habilitando las áreas de expansión. Pero abrir una cama supone tener personal para atenderla; es decir, contratar más. La dirección dice que lo hace y que no tiene sentido tener personal adicional todo el año que solo se necesita en momentos puntuales. Pero los sindicatos consideran que si esta situación se está dando en un momento sin epidemia alguna es porque el cálculo de camas estructurales que necesita la envejecida población de Ourense -y consiguientemente el de personal de plantilla para atenderlas- es incorrecto.
¿Habrá recorte de camas?
Los sindicatos dicen que es evidente porque no se contempla aumento de presupuesto. La dirección asegura que no, y que seguirá habilitando más cuando se necesiten. Aseguran que las camas estructurales se fijarán cuando culmine el plan funcional que están elaborando para fijar las «verdaderas necesidades» de la población ourensana.