Internet se convierte en fuente útil para localizar delitos y delincuentes

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Un ourensano exponía herramientas robadas con una foto de la estantería del local

21 mar 2018 . Actualizado a las 16:00 h.

En Internet se puede encontrar sicario para intentar acabar con la vida de otra persona. También es fácil ofrecer a la venta cualquier efecto, de uso común o menos extendido, igual puede ser un teléfono de alta gama como una desbrozadora o alguna pieza para un Jaguar, por citar solo casos que dieron lugar a la apertura de diligencias judiciales en Ourense. Y si en un mercado de productos usados a nadie extraña que la policía acuda y vea de forma discreta qué y quién vende, con lo cual algún delito se podrá esclarecer, en el expositor global e interminable que es Internet también encuentran información los cuerpos de seguridad. Lo más reciente, al presunto autor de la sustracción de herramientas en un establecimiento de la carretera de Vigo.

Hace pocas fechas que las pesquisas de la unidad de policía judicial de la Guardia Civil de Ourense condujeron a dos de los supuestos autores de un robo, porque uno de ellos -tras alcanzar la condición de sospechoso y ser identificado- expuso en su Facebook una foto que lo relacionaba con las imágenes grabadas por una cámara de seguridad del establecimiento asaltado: hasta vestía la misma ropa.

Poco precavido

El ourensano que esta semana ha sido detenido tras una investigación de la unidad de delincuencia especializada y violenta (UDEV) de la comisaría de policía de Ourense, como presunto autor del hurto, también dejó una pista fácil de seguir en Internet. Puso a la venta efectos presuntamente sustraídos en un establecimiento especializado en bricolaje. Hasta ahí resulta más o menos previsible. R. L. D. fue un paso más allá y mostró las herramientas tal cual estaban expuestas en el local comercial.

El expositor le daba una cierta apariencia a la oferta de venta, pero también fue el hilo del que tiró la policía para llegar a él. Probablemente no contaba este poco experimentado ratero con que el encargado del negocio se había fijado en él cuando estuvo en el local el día 18 del pasado mes de diciembre.

Sospechosa discreción

Al empleado le sorprendió ver a alguien haciendo fotos de forma tan discreta que llamaba la atención y moviéndose de tal modo que le resultó sospechoso. Luego se percató de la desaparición de varias herramientas. Fue cuestión de atar cabos y llegar a él.

Tiene este ourensano 28 años y esta es su octava detención. La policía no tiene dudas sobre su responsabilidad en el hurto de efectos en un establecimiento de la carretera de Vigo. Es un local amplio. Según las conclusiones del trabajo policial, una vez que echaba el ojo a lo que le interesaba, rondaba la zona y se las llevaba en una mochila, de acuerdo con la investigación que se ha aportado al juzgado de guardia.

Una cara conocida

Las pesquisas policiales permitieron localizar en Internet no solo la mercancía sino incluso las fotos de la estantería. Todo estaba a la venta. Fue entonces cuestión de seguir tirando hasta llegar al vendedor. Era cuestión de tiempo y de superar obstáculos formales. Fue detenido el martes. Al denunciante y responsable de la tienda, con quien también ha contado la policía para completar la identificación, le era cara conocida la del detenido.

Piezas retiradas del establecimiento en una mochila

El encargado del establecimiento había comunicado a la policía cómo, sobre las dos y media de la tarde, a una hora con poco público, había observado a un individuo en actitud sospechosa, ya que se mostraba vigilante y de manera discreta hacía fotografías a las herramientas. Posteriormente apreció el denunciante que le habían hurtado un taladro, un atornillador y otras piezas, que valoró en unos 1.500 euros.