«Escuchaba música antigua de pequeño y me enganché»

Cándida Andaluz Corujo
c. andaluz OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

MIGUEL VILLAR

El tenor Wolodymyr Smishkewych ofreció una clase magistral en el conservatorio de Ourense

07 mar 2018 . Actualizado a las 13:27 h.

El tenor Wolodymyr Smishkewych está estos días en Ourense. Protagonizó ayer el concierto del festival internacional de música Pórtico do Paraíso en el Arqueolóxico, pero tuvo tiempo de acercarse al conservatorio para mantener un encuentro con los amantes de la música y de la cultura en general. Vlad, como le llaman, nació en Estados Unidos y vive en Irlanda, pero habla perfectamente el gallego. Su madre, de A Mariña, tiene mucho que ver. Y su nombre y apellido nos llevan a su padre, ucraniano de nacimiento. Estudioso de la música antigua de los siglos X al XIV, Vlad comentó ante los asistentes cómo llegó a interesarse por ella. «Escuchaba música antigua de los discos de mis padres y, sin quererlo, me enganché», dijo. Incluso después de que algún profesor, confesó, le dijera que para qué. Contó lo complicado que resulta describir el sonido de los instrumentos antiguos: «Usamos instrumentos que no se utilizan pero que fueron pensados por los compositores de esa época, por eso los elegimos. Es difícil describir su sonido, es como tener que decir cómo es un color. Pero tiene un carácter especial, un color diferente que es el que a nosotros nos engancha». Vlad explicó cómo poco a poco fue preparando un repertorio, incluso de temas en los que solo había letra. ¿Cómo hacerlo? Investigando, estudiando, buscando en archivos. «Nos hacemos muy buenos amigos de los historiadores», afirmó entre risas. Y para conseguir todo esto, la gran revolución del siglo XX, Internet, ha sido crucial: «Ahora podemos comunicarnos todos los que amamos esta música y compartir nuestras investigaciones».

A finales de los años 90 formó parte del grupo Secuencia. «Era mi sueño», dijo. Y con el inicio del siglo hizo un doctorado en canto con el objetivo de visibilizar la música anterior a 1750. Viajó de Estados Unidos a Irlanda para dar clases de canto y en la actualidad presenta un programa de musica clásica en la radio nacional irlandesa. Todo lo que sabe se plasmará en un libro sobre el canto medieval y cómo se puede interpretar hoy. Vlad es un claro ejemplo de que los sueños de niño a veces se cumplen.