El reto de resucitar el cámping de Untes

Rubén Nóvoa Pérez
rubén nóvoa OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Alvaro Vaquero

El gobierno local encarga un informe para rediseñar la instalación de las riberas del Miño

07 feb 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Una vez que la Justicia dio vía libre al Concello de Ourense para recuperar las instalaciones municipales del cámping de Untes desde la institución local ya se han dado los primeros pasos para tratar de lograr el reto de resucitar el recinto, que tras una escasa trayectoria en manos de Aspanas se encuentra en estos momentos en un pésimo estado y víctima del abandono y del vandalismo.

El gobierno local trabaja en una doble dirección, tal y como informó el concejal de Turismo, Jorge Pumar, a los concejales de los grupos de la oposición en una junta de área celebrada ayer. En primer lugar, un técnico municipal está trabajando en realizar una valoración en profundidad del estado de la instalación situada en las riberas del río Miño. La segunda línea de trabajo mira más hacia el futuro y pasa por solicitar un informe externo en el que se ponga sobre la mesa un análisis de la adaptación del cámping a la realidad urbanística actual, propuestas de reforma y adaptación o posibles actuaciones que puedan ejecutarse en la zona tras la experiencia fallida de Aspanas. Hasta que eso suceda, los visitantes y vecinos de la ciudad que quieran utilizar esta instalación seguirán encontrándose un letrero en la N-120 de color amarillo que advierte de que el recinto está «cerrado temporalmente». Esa provisionalidad, sin embargo, va camino ya de los dos años y medio y a nadie le escapa que cualquier actuación se debe de plantear a medio plazo y, probablemente, ya quede para la siguiente corporación municipal.

En todo caso, la situación se ha desbloqueado a principios de año. Un auto judicial del 16 de enero acababa con la incertidumbre sobre el cámping de Untes. El Concello recibía el visto bueno del juzgado contencioso administrativo número 1 de Ourense para entrar en el recinto y cambiar las cerraduras. Además, le encargaba la elaboración de un informe con un inventario del estado actual de los bienes públicos, que debe acompañarse de un reportaje fotográfico. Ese informe es el que, según informó el concejal de Turismo y Termalismo, se está elaborando por parte de un técnico del Concello y que se prevé se pueda poner a disposición del juzgado en breve.

A esta situación paradójica de que el gobierno de Ourense tuviese que pedir permiso por vía judicial para poder entrar en una instalación propia tras rescindirle el contrato a la empresa concesionaria se llega después de que el administrador concursal de Aspanas Termal eludiese en hasta dos ocasiones entregar las llaves en notificaciones previamente pactadas con el Concello.

La entrada forzosa al recinto, según limita el auto judicial, debe realizarse en horas diurnas durante días laborables y con un límite temporal de dos meses desde que se realizó la notificación, a mediados del mes de enero.

Ya en ese primer momento el Concello de Ourense mostró, a través del concejal de Turismo, la intención del gobierno local de recuperar más pronto que tarde para la ciudad una instalación que nació para cubrir una carencia en la ciudad y que tiene que ver con el campismo. También sigue pendiente la búsqueda de un emplazamiento idóneo para las autocaravanas.