La escultura de lo humano en Miguel Couto se expone en la galería de arte Visol de Ourense
18 dic 2017 . Actualizado a las 21:16 h.«Me huele todo el cuerpo a recién hecho por el jugoso fuego que lo inflama: cunde la creación y se derrama a mi mucha fatiga como un lecho». Miguel Hernández.
María del Carmen Vidal, al frente de la veterana galería de Arte Visol presenta una selección de obras del escultor malpicán Miguel Couto. El bosque de esculturas está compuesto por nueve piezas fundidas en bronce que el artista ha desplazado desde su taller en Arteixo (Lañas) realizadas con la técnica denominada «a la cera perdida». Procedimiento escultórico que consiste en obtener obras de bronce u oro a través de un prototipo tradicionalmente modelado en cera de abeja, hoy sustituida por parafina, gelatina, látex o silicona, que mediante el proceso cambia de registro de cera al metal fundido que adopta en el espacio ausente previamente ocupado por el prototipo la forma exacta con imperfecciones por los restos de los «bebederos». Canales u orificios que permiten el cambio de material y que posteriormente se limarán por ser ajenos a la pieza del modelo anterior.
La pieza se cincela, lima, esgrafía o bruñe, ajusta y patina con ácidos, un costoso y complicado proceso. Por otra parte esta técnica permite la creación de la obra única, aunque en escultura se considere obra original en un número de 7 reproducciones derivadas de una idéntica matriz.
Tecnología adaptada proveniente de la antigüedad, paralelamente desarrollada también por los sumerios, con manifestaciones en India, China, culturas mesoamericanas e Incas. La obra de Miguel Couto arrastra un eco de síntesis poética del Renacimiento Toscano en su ensimismado recogimiento, figuraciones de Marino Marini, experimentando la idea de que el vacío es forma, en una escultura de lo humano, a través de una introspección melancólica cargada de ausencias, en la que presenta al ser humano en su dualidad físico-emocional en reposo, con las cicatrices de la gloria o el olvido en sus facciones.
Hereda cierta frontalidad de la escultura primitiva así como su poder expresivo a través de las incisiones que transforman las luces y sombras en espacios, territorios físicos y volúmenes. Como en el caso de los primitivos actuales, Couto se plantea desde el análisis de las formas naturales, una experimentación a través de los volúmenes orgánicos con estilizaciones de la forma humana que se aproximan, como en la obra de Henry Moore a la abstracción.
Ejemplo de esta influencia de lo orgánico mediante volúmenes hipertrofiados es «Tumbada» en la que la figura reposa sobre un costado exhibiendo una extremidad única y desmesurada, cuyo pie desproporcionado, románico, establece un equilibrio notable en la pieza a la vez que describe un diálogo con el espacio a través del descubrimiento de lo esencial en forma y ritmo que subraya el valor expresivo de la obra. Huecos cóncavos y convexos, vacíos convencionales producto de extremidades flexionadas.
Carácter irreversible
«Pasmado» presenta en la hipertrofia expresiva de un solo miembro, brazo/pierna, la tensión que provoca la ausencia de la parte, metáfora existencial del dolor que asumimos ante una pérdida y para el que nunca se nos prepara. Ausencia que quema por su carácter irreversible, aguijoneado por la culpa de lo que no se puede cambiar. Angustia por el pasado incapaz de rectificarse, por un presente reflexivo e incierto y un futuro que viene con el poso amargo de lo que nunca volverá y su condena de un vacío sordo y mudo de milagros.
El artista exagera el volumen del gemelo que más que en reposo se presenta en tensión. Se aprecia una exégesis de la obra de Moore en los volúmenes y distintos grados de definición, construyendo un rastro anónimo como tipología masculina en el que destaca o insinúa los rasgos de manera que describe el modelo humano en general sin interés por singularizar al personaje.
Mantiene esta inspiración «Arquitecto», escultura patinada con un efecto cromático que subraya la armonía y belleza de la obra. Somete a una estilización las extremidades convertidas en compás abierto, alegoría de la geometría, de la letra A, origen, de la arquitectura y la equidad cuya representación simbólica es el poder de medir, la producción técnica y la creación. El concepto de producción está implícito en el arte contemporáneo. La serie como saga de un producto. La obra de arte como mercancía, bien. Otras abstracciones sobre la figura humana se aprecian en «Maternidad» que remite a los grupos familiares de Moore.
Couto es conocido por su obra pública con una figuración vigorosa y humana y una fisicidad heroica y sublime que recuerda la obra de Ramón Conde.