Golpear y amenazar con un cuchillo a su pareja puede costarle dos años de prisión

La Voz OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

La víctima no quiso ir a un centro médico ni ser reconocida por un forense

13 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

La sala de vistas del Juzgado de lo Penal número dos de Ourense fue ayer objeto de varias vistas por delitos de violencia doméstica. En uno de ellos, que finalmente tuvo que suspenderse, el fiscal reclama una condena de un año de prisión para Rubén L. G., a quien se acusa de haber golpeado e incluso amenazado con un cuchillo a su compañera sentimental.

Los hechos que dieron origen a este caso tuvieron lugar, presuntamente, el 20 de octubre pasado. De acuerdo con el escrito de acusación, cuando el acusado se encontraba con su pareja en el piso que ambos comparten, en la capital ourensana, comenzó una discusión entre ellos, durante la cual el acusado habría arrojado a la mujer al suelo, poniéndose luego encima de ella para golpearle de forma repetida en la cara. Transcurrido un tiempo, cuando la víctima se encontraba dentro de una habitación, el hombre habría entrado en ella con un cuchillo de 31 centímetros de hoja en la mano. Con él, se habría dirigido a la víctima, manifestándole que «si iba detenido la mataría».

Más tarde volvió a pegar a la chica, quien pese a esta grave situación no quiso acudir a un centro médico, negándose además a ser reconocida por un forense. El fiscal califica estos hechos como un delito de maltrato y otro de amenazas, reclamando por ambos dos años de prisión, así como medidas de alejamiento de la víctima.

«Soy capaz de envenenarla»

Otro caso de maltrato llevó al banquillo de los acusados ayer a Antero R. T., a quien se imputa un delito de amenazas por los hechos ocurridos, presuntamente, el 30 de julio del 2016 en un domicilio de Coles. De acuerdo con el relato del fiscal, el sospechoso mantuvo una conversación telefónica con una mujer, durante la cual se refirió a su esposa. Al hablar de ella habría proferido, en varias ocasiones, expresiones como «a esa mujer la mato, cualquier día la mato», o «soy capaz de envenenarla, la mato». El fiscal pide trabajos en beneficio a la comunidad y alejamiento.