«El partido ante el Estrada es una final y tenemos que afrontarlo así»

OURENSE CIUDAD

álvaro vaquero

El entrenador del Sala Ourense cree que dejar a siete puntos al segundo clasificado sería un paso de gigante

09 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El esperanzador proyecto del Sala Ourense reclutó el pasado año a un experimentado técnico para dirigir los destinos de su primera plantilla. Los responsables del organigrama del club lograron que regresara a los banquillos Kike García (Laza, 1967), pese a el entrenador -con experiencia en todas las categorías, salvo la entonces llamada División de Honor- ya acumulaba siete años sabáticos.

«No me planteaba volver, pero me gustó el proyecto y me van los retos. El equipo acababa de descender a Tercera y solo había siete jugadores. Aún así, fuimos llegamos a liderar la Liga durante varias jornadas y terminamos terceros, además de ganar las Copas», apunta el preparador que había trabado con anterioridad en equipos de competición nacional como el Estreliña Verín o el Ourense FS.

Una vez que Kike probó de nuevo el veneno del fútbol sala, en el seno de la entidad capitalina ya sabían que contarían con su máxima implicación: «Como este deporte me gusta muchísimo, me volqué otra vez. El año pasado tuvimos algún problema con los entrenamientos, porque la cancha del anexo no era la más adecuada para nosotros, pero ahora estamos trabajando muy bien. Además, teníamos un equipo con una columna vertebral muy buena del año pasado. Todos saben lo que quiero y como lo quiero y a eso se han adaptado también los jugadores que han llegado. Yo prefiero a los Pistons que fueron campeones de la NBA que a los Globetrotters. Currar y currar, que es lo que hacen los chavales de esta plantilla».

Y el carácter guerrero que García atribuye al elenco del Sala Ourense no equivale a que se trate de un conjunto tosco, porque el plantel que está dominando con autoridad su grupo de Tercera División tiene otras cualidades que une a la de no negociar el esfuerzo: «Ante todo, son buenas personas y, como me gusta decir a mí, grandes peloteros. Son jugadores de balón y cuanto más tiempo lo tengan mejor, porque obligan a los otros a defenderse. Mi filosofía para afrontar este deporte es esa y tanto los que estaban aquí, como los que han llegado están capacitados para poner en práctica ese estilo. Aprietan al contrario para tenerlo, pero la finalidad es jugar con el esférico en nuestro poder». Una cuestión de fundamentos que ha calado en el conjunto ourensano.

Desafío

Y ante esa propuesta deportiva que defiende la escuadra de Kike, se encontrará mañana a mediodía en Os Remedios con la que presenta el Estrada Futsal, otro de los candidatos a hacerse con el primer puesto de la competición, si bien ahora mismo son los ourensanos los que mantienen una renta de cuatro puntos: «El partido ante el segundo es una final y tenemos que afrontarlo así. Ellos están más presionados, pero si les ganamos los dejaremos a siete puntos y será un duro golpe para ellos, mientras que si perdemos, seguimos jugando». Aún con la convicción en la buena línea del trabajo que desarrolla su equipo, el entrenador es también respetuoso con el estilo de los estradenses: «Es un equipo con mucho oficio, aguerrido y duro, muy difícil de ganar. Sobre todo son muy peligrosos en su cancha, donde su público mete una gran presión al rival, pero también aquí será un adversario muy complicado».

García cree que la clasificación ya está marcando diferencias, aún con todas las vueltas que puede dar el torneo. Al Estrada lo mete directamente en la baraja y tampoco descarta al Pazos de Borbén: «Ahora está un poco distanciado, pero es el campeón de los últimos años y es capaz de volver a engancharse. También hay que contar con el Ribeira y el Coruxo, que son oponentes a tener en cuenta».

Nueve jornadas sin conocer la derrota en la Liga

El Sala Ourense solo perdió un partido en las doce jornadas disputadas hasta la fecha y fue en la tercera jornada, cuando cayó en la pista del Outeiro de Rey -el actual sexto clasificado-, porque un apretado 4-3 dejó a los de Kike García sin recompensa tras un intenso duelo. Era el 30 de septiembre y, más de dos meses después, la formación capitalina ha enlazado nueve partidos en los que solo presenta el borrón de un empate en la cancha del Bueu (4-4), ante un enemigo que parecía batible para un combinado que está siendo muy regular en su rendimiento.

Son 25 puntos de 27 posibles en los que además ha convertido Os Remedios en un auténtico fortín, en el cual ya doblegó al Ribeira (6-3) y al Pazos de Borbén (3-2), entre otros aspirantes a las posiciones de privilegio. Ahora, ya en diciembre, el 1-6 en una pista como la de Vilalba, en la que el propio Kike recordaba «los bombos te los meten en las orejas y el público empuja todo el partido», ya representó un paso al frente de un líder sólido, que encadenará dos auténticos cara a cara, frente al Estrada Futsal, en ese esperado primero contra segundo de mañana, y en Coruxo, pista en la que cerrarán el año los ourensanos con opción a consolidar su primera plaza o, al menos, defenderla para alzarse con el título honorífico de campeón de invierno, ya que la primera vuelta concluirá ante el Rececende el veinte de enero, tras un parón de más de un mes en el calendario competitivo.

Mientras tanto, García sigue confiando en la proyección de su plantilla, más allá incluso de este curso: «Tengo quince jugadores y tengo que comerme el marrón de dejar fuera a tres cada semana, pero es que incluso hay dos o tres más en la base del club que podrían echarnos una mano. Este equipo es el futuro del fútbol sala masculino en la provincia y el proyecto es muy sólido».