La ola de incendios marcó la celebración del Día de la Constitución en Ourense

edith filgueira OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Álvaro Vaquero

El subdelegado del Gobierno apeló a la conservación y cuidado del medio ambiente

07 dic 2017 . Actualizado a las 20:56 h.

Treinta y nueve años acaba de cumplir la Constitución española. Los mismos que duró el franquismo y sin embargo la sensación de velocidad ha sido mucho mayor durante las últimas cuatro décadas por los cambios que trajo consigo la Carta Magna. Cambios que todavía están latentes y a los que el subdelegado del Gobierno, Roberto Castro, hizo referencia en su discurso respecto a la problemática catalana.

«Hoy, Día de la Constitución, más que nunca si cabe, hemos de manifestar nuestro respeto y nuestro agradecimiento con aquellos que -hace ya 39 años- hicieron el esfuerzo compartido de buscar un texto en el que sentirse y sentirnos todos cómodos. Podrían haber defendido en 1978 otras legítimas propuestas y, sin embargo, no lo hicieron», incidió ante un Auditorio municipal lleno de adultos y niños. En este instante de su discurso también recordó la figura del recientemente fallecido Manuel Marín. «Europeísta convencido, español íntegro, trabajador incansable por España, figura clave del ingreso de nuestro país en la Unión Europea y presidente del Congreso de los Diputados entre 2004 y 2008», afirmó.

Los incendios sufridos en Galicia el pasado mes de octubre fueron otros de los protagonistas de un acto en el que, desde la administración estatal, se apeló a la conservación y cuidado del medio natural. «No es admisible que perdamos impunemente, cada año, miles de hectáreas calcinadas por la acción de manos irresponsables, cuando no presuntamente asesinas, y veamos cómo nuestros compatriotas pierden la vida y sus pertenencias», destacó. Y mencionando diferentes obras literarias en las que los árboles son los protagonistas, Castro reivindicó la importancia del paisaje y la identidad gallega. «Son los árboles el sentido y la esperanza: porque todos mantenemos una relación estrecha con estos templos de la vida que anuncian con su estampa la semilla de la paz y la esperanza. Porque a fin de cuentas, no somos más que eso: árboles arraigados en un mundo en el que nos ha tocado vivir. Un mundo heredado y que tenemos la obligación de dejar en herencia», añadió.

La nota de color e inocencia la pusieron los niños que participaron en la trigésimo cuarta edición del concurso de la Constitución con sus ilustraciones. Uno por uno subieron al escenario a recoger su premio: un ejemplar de la Carta Magna y una cámara de fotos sumergible.

Los de Secundaria y Bachillerato -que fueron escogidos por sus redacciones y reflexiones sobre el Título VIII de la Constitución sobre la organización territorial del Estado- ganaron un viaje a Madrid para conocer la Cámara Alta y la Cámara Baja.

La banda juvenil de la escuela municipal de música de Celanova fue la encargada de abrir y poner el broche al acto con la interpretación del himno gallego y español.

Distinciones para defensores de la seguridad y proyectos en favor de la sociedad

Durante la celebración, la Subdelegación del Gobierno entregó menciones especiales a profesionales de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado que dedicaron su vida a la ciudadanía. De la Guardia Civil se reconoció el trabajo de Jesús Gómez Suárez, como teniente coronel jefe del centro de coordinación regional de Canarias, y a Orentino Varela Pérez, como teniente coronel jefe del sector de Tráfico de Castilla la Mancha.

Subieron al escenario a recoger distinciones a la Orden del Mérito Civil: Antonio Álvarez Valencia, comisario jefe de la Policía Nacional de Ourense; Gumersindo Villar González, jefe de la brigada de la Policía Científica de la Comisaría de Ourense; y Enrique Fernández Fernández, inspector jefe de la sección técnica también de la Comisaría de Ourense.

El director general de Protección Civil y Emergencias, Alejandro Moreira Garrido, recogió la medalla al mérito de su categoría con distintivo azul.

Por otro lado, la Administración quiso reconocer con menciones especiales al padre Faustino Míguez -por su contribución a la educación de niñas y mujeres desfavorecidas fundando el Instituto Calasancio Hijas de la Divina Pastora- y a la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzhéimer de Ourense que desde 1995 ofrece apoyo a los afectados por este tipo de demencia.