Formando a superespecialistas

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MIGUEL VILLAR

La USC y el CHUO estrenan el máster de microcirugía reconstructiva de cabeza y cuello

03 may 2017 . Actualizado a las 12:57 h.

En 1998 el cirujano Pedro Trillo Parejo y el veterinario José Luis Toubes crearon en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense un laboratorio de microcirugía experimental que ha funcionado de forma ininterrumpida desde entonces. La experiencia y el nivel del trabajo desarrollado por este centro integrado en el CHUO -que tiene un programa anual propio de cursos formativos-, le ha valido ser seleccionado por la Universidad de Santiago de Compostela para la fase práctica de su Máster de Microcirugía Reconstructiva en Cabeza y Cuello, que es no solo el primero con tal especialización que se desarrolla a nivel gallego, sino en toda España. «Es un máster universitario con 60 créditos para distintos especialistas quirúrgicos que quieran desarrollar su trabajo profesional en la microcirugía reconstructiva de cabeza y cuello; y para nosotros es un orgullo que nos hayan seleccionado», señaló Pedro Trillo que ayer, al comunicar la noticia, opinaba que esta selección «supone también un éxito para esta área sanitaria y para este hospital universitario».

El primer grupo de cuatro cirujanos gallegos que se han incorporado a ese máster ya ha pasado por esta instalación ourensana para realizar las prácticas y ayer iniciaban esa misma fase otros cuatro. «Los grupos son tan reducidos porque los alumnos están totalmente tutorizados, con un profesor enseñando y estando presencialmente con ellos para supervisar el trabajo con el objetivo de que realicen las técnicas lo mejor posible y para mantener la calidad», explica el cirujano responsable de este laboratorio de microcirugía experimental.

Trillo explica que en la microcirugía de cabeza y cuello se aúnan un grupo de especialidades quirúrgicas. «El cirujano general normalmente cuando hace cuello hace cirugía endocrinológica, pero hay tres especialidades que hacen microcirugía en la cabeza y el cuello: los otorrinolaringólogos, los cirujanos plásticos y los maxilofaciales». El máster de la USC es por tanto una superespecialización para cirujanos en activo y ya especialistas en tipos de intervenciones concretas.

La aplicación de la microcirugía viene a ser, coloquialmente hablando, como el encaje de bolillos quirúrgico: un trabajo delicado y de alta precisión que permite trasponer vasos, arterias y nervios de una parte del cuerpo a otra que se ha perdido. Por ese motivo, para alcanzar esta superespecialización -además de la formación teórica- se necesita adquirir un alto nivel de habilidad para abordar el trabajo con esos elementos de tamaño muy reducido. Esa es la razón de que la práctica se realice en instalaciones como la de Ourense, donde se trabaja con pequeños animales destinados a la experimentación bajo las exigencias de la normativa actual. «La microcirugía es una técnica que utiliza material de suturas especiales bajo medios de magnificación óptica, que es el microscopio, y con unas microsuturas que son casi invisibles al ojo humano; por eso utilizamos vasos pequeños para el aprendizaje; porque es más difícil», aclara Pedro Trillo.

Las técnicas que aprenderán a dominar los participantes en este máster concreto se aplicarán a pacientes que han perdido por accidente o por una enfermedad, como puede ser el cáncer, alguna parte de la estructura de su cara o cuello. Se formarán en técnicas de transferencia de otros tejidos para subirlos a esa zona afectada. «Por ejemplo, se puede subir el músculo dorsal ancho o el rectoabdominal que está en la zona de la barriga, con su pedículo vascular, para sustituir la lengua o una parte del cuello», ejemplifica el cirujano ourensano. El recién estrenado máster de la USC permitirá a ocho cirujanos dominar las técnicas para cada caso concreto, tanto en su faceta teórica como en la práctica que se realizará en este laboratorio experimental del CHUO, pero según avanzaba Trillo, la aspiración es que tenga continuidad en el tiempo para poder seguir formando a más especialistas gallegos.

El responsable del Laboratorio de Microcirugía Experimental del CHUO agradecía ayer la confianza de la Universidad compostelana y también el apoyo de los gerentes y los jefes de Cirugía ourensanos que desde el inicio apostaron por «por desarrollar esta técnica aquí» y deseó que en el futuro el del CHUO se convierta en «un gran centro de simulación y experimentación similar al que hay en otros lugares».