Literatura empaquetada para comprar sin prejuicios por menos de diez euros
13 abr 2017 . Actualizado a las 09:09 h.«Las librerías estamos bastante maltratadas a nivel institucional, se ha recortado muchísimo en cultura y no se está fomentando la lectura, de hecho han cerrado varias en la ciudad y a nivel nacional, muchas más. Somos una especie de quijotes». Este es el panorama al que se enfrentan todos los libreros y que Javier Ibáñez conoce y describe a la perfección. Sin embargo, él, desde Eixo (Ourense, 1999) ha marcado una pequeña diferencia inintencionada: citas a ciegas con libros que aumentan la curiosidad de los lectores y, en consecuencia, las ventas.
El pasado 7 de abril, la librería cumplió la mayoría de edad intentando en todo momento no ser un mero establecimiento en el que comprar libros. Ofrecen un trato personalizado y organizan actividades culturales como presentaciones -en las que los lectores pueden interactuar con los autores-, cuentacuentos o microteatro. Esta vez Javier ha probado suerte con algo un poco más romántico que se le ocurrió a su mujer buceando por internet. «La idea surgió cuando ella estaba indagando formas de empaquetar libros. Estaba buscando una idea para el Día del Libro y al final la convertimos en aplicable a todo el mes de abril. El año pasado hicimos microteatro por el aniversario de la muerte de Cervantes y Shakespeare y este queríamos innovar de otro modo». Libros empaquetados de tal modo que no se pueda ver la portada ni su reverso. Con una tarjeta que reza: «Ten una cita a ciegas con un libro». Y datos del autor -lugar de nacimiento, profesión o premios recibidos- y del género al que pertenece o los temas que trata. Pero nunca el título o el escritor.
La iniciativa está teniendo muy buena acogida, según explica Javier Ibáñez, que además se ha fijado en que «un porcentaje grandísimo en ventas es a mujeres porque parece que les atrae mucho más la idea». Entrar por los ojos se antoja importante cuando, como explica, las ventas por internet no diferencian a unas librerías de otras, ya que el precio de venta al público es el mismo para todos los establecimientos. Con lo cual la diferencia la marca el trato personal y ser capaz de atraer a los lectores con proposiciones diferentes y originales.
Las obras se seleccionan teniendo en cuenta la calidad literaria. «Autores buenos, premios Nobel, premios Cervantes» fueron los primeros en emplearse, pero dado que cada día hay que reponer los ejemplares y más personas se acercan hasta Eixo en busca de su cita particular, los horizontes se han ampliado a algunas de las obras más vendidas «aunque la calidad literaria en ocasiones no sea tan alta». Se trata de leer sin prejuicios o sin guiarse por estereotipos y por un precio no superior a los 10 euros. Se trata también de poder descubrir a autores desconocidos o en los que uno no habría reparado si el libro estuviese en una estantería. Desde García Márquez hasta Camus, pasando por Fiódor Dostoievski.
En su página de Facebook, el día 1 de abril, Javier y su mujer escribieron que barajaban la posibilidad de que si la iniciativa no funcionaba sería porque «ya no quedan románticos», pero que si por el contrario participaba mucha gente sería porque éstos aún resisten. Pues bien, todavía quedan soñadores. Y ojalá haya muchos más escondidos.