El joven acusado del crimen del farmacéutico llega a juicio con 3 años y medio de cárcel cumplidos

La Voz OURENSE / LA VOZ

OURENSE CIUDAD

Miguel Villar

La Audiencia Provincial reserva cuatro días del mes de abril para analizar un suceso ocurrido en octubre del año 2013

28 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El joven de origen rumano Alexandru M. L. cumplió el miércoles pasado 22 años. Lleva en prisión desde los primeros días de octubre del 2013 como presunto autor de la muerte a cuchilladas del farmacéutico Tomás Milia. La Audiencia Provincial de Ourense ha fijado cuatro días de la última semana de abril para celebrar la vista correspondiente a aquella muerte y a las circunstancias que la rodearon. La petición de penas que formulan la fiscalía y las acusaciones particulares, hermanos y sobrinos, como su viudo, suman hasta un máximo de 49 años y medio en el peor de los escenarios. Sea cual fuere el desenlace del juicio, el imputado podrá descontar de su eventual condena los tres años y medio largos que lleva en prisión preventiva, sin que las peticiones de su defensa para conseguir la libertad provisional hubieran sido atendidas ni por el juez de instrucción ni por la Audiencia.

Llega Alexandru a juicio después de una instrucción que se complicó en la última fase debido a la exigencia de evaluar el alcance del incendio, los daños y el eventual riesgo para las viviendas próximas al 5ºA de Curros Enríquez, 4, donde se produjo el suceso. Según mantienen las acusaciones, el imputado regresó de madrugada a la vivienda donde había dejado el cadáver, para trasladarlo a la bañera, lavarlo con lejía y quemar a continuación el colchón de la habitación principal con la intención de borrar huellas de su paso.

El vista oral ha quedado señalada para los días 4 a 27 de abril. Las partes, tanto las acusaciones como la defensa, han propuesto a un buen número de peritos y testigos, entre los que no aparecen los dos policías locales a quienes en su momento se atribuyó la detención material del acusado tras haberlo visto salir de la vivienda por segunda vez, poco antes de las seis de la madrugada. Tampoco los bomberos que participaron en la extinción y hallaron el cadáver han sido convocados a la vista.

A juicio se llega, por otra parte, después de que la policía hubiese descartado la intervención de terceras personas. El hecho de que el viudo del farmacéutico hubiera encargado los trámites del divorcio a un abogado ourensano , como también que hubiese encargado a un detective que documentara las supuestas relaciones de su teórica pareja con dos chicas, abría una vía de investigación que fue descartada por la policía al no hallar conexión entre el viudo y el presunto autor material de la muerte. Este, además, no solo llevaba ropa ensangrentada y cuchillos, sino que confesó de forma espontánea.

El defensor ha citado, no obstante, al abogado del divorcio y a dos presuntas novias o amantes del viudo, que está personado en la causa como acusación particular. Lo están, igualmente, hermanos y sobrino del muerto.

Para Alexandru M. L. pide la familia de Tomás Milia veinte años de cárcel por asesinato; cinco, por robo con violencia, y veinte más por el incendio de la vivienda. La fiscalía propone catorce años por asesinato, doce por el incendio; cuatro por robo y tres por atentado a agentes de la autoridad. Mantiene que accedió a la vivienda, discutieron por el precio de un servicio de carácter sexual, lo mató, robó luego unos relojes, salió de casa, intentó arrollar a un policía cuando lo identificaban sin conocer aún lo ocurrido en el piso antes de la medianoche, regresó, provocó el incendio, salió y fue detenido.