El alcalde pide a San Martiño «buen temperamento» y espíritu de «consenso» para la corporación

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Los ourensanos agradecieron con un cerrado aplauso la carta escrita por el papa Francisco, que leyó el arzobispo de Belcastro, el ourensano José Rodríguez Carballo, al final de la celebración litúrgica

11 nov 2016 . Actualizado a las 20:35 h.

La catedral de Ourense se vistió de gala para la celebración de los oficios religiosos en honor al patrón San Martiño, de cuyo nacimiento este año se conmemoraba además el 1.700 aniversario. La solemnidad de la fecha se perfiló ya desde el desfile de la corporación entre la consistorial y el templo, acompañada de maceros, pendones y guardia de gala (como manda el protocolo de las grandes ocasiones) y de la banda de gaitas de Verea, que también acompañó la procesión de la imagen del santo en la procesión por el interior del templo al ritmo de la marcha del antiguo reino de Galicia. Diez obispos titulares y eméritos dieron boato a la celebración a la que también acudió el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijoo, además de otros representantes del parlamento gallego, el subdelegado del gobierno y la corporación ourensana.    

El alcalde de Ourense, encargado como manda la tradición de realizar la ofrenda, inició su discurso confesándose «dobremente honrado» por el hecho de representar a los ourensanos en este acto y de hacerlo este año de celebración especial por el 1.700 aniversario del nacimiento del patrón de la ciudad. Jesús Vázquez inició su intervención pidiendo proteccióon para todos los ourensanos y de forma especial a quienes más han sufrido por la crisis económica y de quienes afrontan especiales dificultades en su vida y, en este sentido, resaltó el espíritu solidario de los ourensanos materializado en colectivos sociales que ayudan a muchos vecinos a través de su acción. Entre ellos citó a Aspanas, recordando que acaban de cumplir medio siglo de existencia; Cruz Roja o el Banco de Alimentos. «Pido para eles o teu alento e tamén que, entre todos, sexamos quen de alcanzar a ambición colectiva de que cada vez haxa menos xente que precise da nosa axuda porque teñan cada vez máis oportunidades, especialmente en forma de emprego, en cantidade e en calidade», añadió. Solicitó también el apoyo del santo a los emprendedores «que dan o mellor de si mesmos para crear riqueza e postos de traballo», a los jóvenes «que afrontan con ilusión a creación dun proxecto empresarial» y a los trabajadores «que fan competitivas as empresas». «Todos eles son o mellor aval de que, xuntos, lograremos alcanzar o futuro con maior fortaleza», matizó.

Vázquez reservó una parte de su intervención para dos retos que afronta la sociedad actual: el terrorismo internacional y la violencia machista.«Os que temos a oportunidade de poder vivir en plenitude non podemos resignarnos fronte a enfermidade moral que levou a 269 mulleres ourensás, por exemplo, a sufrir a violencia machista e precisar de ser protexida polos Corpos e Forzas de Seguridade. Tampouco contra a ameaza terrorista dos que desprezan a nosa vida e a nosa liberdade», dijo.

El regidor, que cambió en varios momentos el gallego por el castellano en consideración a la retransmisión del oficio religioso que estaba realizando una televisión nacional, echó mano de una cita de Martin Luther King para insistir en la necesidad, aludida en varias ocasiones durante el discurso, de buscar referentes para construir un mejor futuro. «Me preocupa, santo patrón, que la sociedad que nos suceda sea conformista y carente de iniciativa. Me ofusca que no se valore el trabajo y el esfuerzo. Me inquieta que el egocentrismo desplace a la tolerancia y al pensamiento crítico. Me apena que nuestra sociedad se contagie del mal populista y convierta a las próximas generaciones en seres abocados a la frustración y al desinterés». El alcalde no dejó pasar la oportunidad de enviar un recado a la propia corporación que preside: «Si se ahonda en la división permanente, si se persevera en el conflicto, si se actúa bajo personalismos irracionales, o si se cree estar en posesión de la verdad absoluta no estaremos representando a esta ciudad, que avanza unida, serena y humilde». Pidió al santo que guíe a quienes tienen responsabilidades públicas «hacia ese punto en el que todos entendamos que sólo desde la colaboración y el consenso lograremos la fórmula perfecta para trabajar con más acierto por los demás. El futuro de Ourense está en nuestras manos y es nuestra obligación servir a la ciudad con el mejor de los temperamentos», manifestó.

El obispo de Ourense, Leonardo Lemos Montanet, centró su homilía en dar contestación a las peticiones del alcalde con el ejemplo de episodios de la vida de Martín de Tours y utilizando palabras del actual papa Francisco para expresar su deseo de una ciudad «en proceso constante de humanización para la que hace falta memoria, valor y una sana y humana utopía». Por cierto que el pontífice estuvo muy presente en la celebración, ya que, junto con su bendición y la indulgencia plenaria de sus pecados para quienes se hubiesen confesado y comulgado, envió una carta dirigida al propio obispo y a los fieles ourensanos para ser leída durante la misa. El encargado de hacerlo fue el también ourensano José Rodríguez Carballo, arzobispo de Belcastro y secretario  de la Congregación para los Institutos de la Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica, que se desplazó para la ocasión. Al final de la lectura, los asistentes rompieron en un fuerte aplauso. Fue uno de los momentos más emotivos de la ceremonia en la que los fieles pudieron escuchar por primera vez, en las voces de la Coral de Ruada, la nueva pieza musical creada para este aniversario del nacimiento del santo por José Ramón Estévez y Serafín Marqués.

De emotividad habló también Núñez Feijoo a la salida de la ceremonia religiosa, recordando no solo su condición de ourensano sino la circunstancia de que esta fecha sea la del cumpleaños de su padre, fallecido este mismo año. El presidente de la Xunta señaló que en este primer acto oficial tras la toma de posesión para la que es su tercera legislatura, pide al santo «acerto» para esa tarea, tanto para él como para el resto de integrantes del equipo de gobierno que dará a conocer el próximo domingo.