«No se trata de saber señales, sino aprender hábitos y comportamiento»

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OURENSE CIUDAD

Sinda Aguiar, en las instalaciones de Tráfico en Santa Cruz.
Sinda Aguiar, en las instalaciones de Tráfico en Santa Cruz. santi m. amil

23 abr 2016 . Actualizado a las 18:38 h.

La coordinadora de educación vial de la DGT en Ourense, Sinda Aguiar Rodríguez, ocupa el puesto desde el año 2001, después de haber pasado por Madrid y Pontevedra.

-Dice que si un niño presta atención a su bicicleta, si la cuida y se preocupa por ella acabará haciendo lo propio con su coche cuando sea mayor...

-La educación vial es una educación en valores. Es diferente durante la vida de una persona y tendrá en cuenta las características psicológicas evolutivas y las necesidades sociales que puedan presentarse. Es diferente para un joven de 14 años o un adulto de 60. Las necesidades son diferentes. Nos debemos educar para prevenir accidentes, pero también para la vida. Los contenidos de la educación vial han de adaptarse al momento. Padres, madres, profesores, policías locales, asociaciones... todo aquello que sirva para el desarrollo y la prevención es bueno.

-¿Hay suficiente implicación en la escuela en Ourense?

-Sin duda, pero no solo de los docentes, desde los colegios. Se está trabajando mucho. Hay centros con los que trabajo desde el primer día y no necesariamente en la capital. Es interesante. En Ourense, además, tenemos una ayuda grandísima con el parque infantil de tráfico, el de Expourense, que lleva el Concello.

-¿Cree que se mantendrá la tendencia y seguirán creciendo la oferta de educación vial?

-Cada vez hay más implicación y más participación. Y los resultados se ven. Algo estaremos haciendo bien cuando vemos como baja la siniestralidad y el grupo en el que baja, que es el de los jóvenes. Hubo épocas, a finales de los noventa, en las que era horrible. Cada fin de semana dejaba varios muertos, por el problema añadido de que los coches iban completos con gente joven.

-Atropellos. Hay muchos y la policía local recuerda a los peatones cuáles son los lugares por donde cruzar. ¿Es normal?

-A veces vamos demasiado rápido por las prisas. Y olvidamos que no tenemos tanta capacidad para escapar de un semáforo que se pone intermitente. Hay que concienciar, concienciar y concienciar. Esa es la clave.

-¿En su trabajo son más agradecidos los niños o los adultos?

-Los mayores se involucran mucho, pero los niños son una pasada. Se lo aprenden todo. Son capaces de llegar un día y contarte que se saben cincuenta señales. No las van a utilizar hasta que tengan veinte años, pero se las aprenden. La educación vial no es eso. No se trata de saber señales, sino hábitos y comportamientos. Si un niño va en bici a los 8 años, claro que tiene saber señales, pero lo básico. ¿Qué le importa la de fin de una autovía, si en el triciclo o en la bici no va a circular por esa vía? Son esponjas. Se ve en el parque infantil con las bicicletas. Lo respetan todo. De todas formas, notamos que hay niños que aún no saben andar en bicicleta.

-¿Medio urbano o rural?

-En la ciudad es más difícil. No todo el mundo tiene sitio adecuado. Pero muchos de esos niños te cuentan que cuando van al pueblo sí andan en bici. En la ciudad, de todos modos, hay lugares excelentes para usarla, siempre con un adulto al lado.

-¿Qué tal es la actitud de los adultos en los cursos?

-Diferente. ¿Cómo le dices a una persona que ha conducido y ha sido sancionado por conducir con una tasa de alcohol de 0,80 que incluso con 0,25 no se debe conducir. Si él iba bien, afirma. Al adulto, sobre todo en cursos de recuperación, o en trabajos comunitarios, le cuesta más. De todos modos cuando le dices que tienen que ser ejemplo para los pequeños se dan cuenta de lo que hay. En nada estaremos en 0,0 de tasa permitida.

-Los chalecos para los peatones son otra historia..

-Que si molesta, que si da calor, que si saben bien por donde van, todo son quejas, pero, al final, da alegría ver cada vez más a personas mayores caminando y con chaleco por las carreteras. Transmitimos que el riesgo es para todos, para el peatón y también para el conductor. Hazte ver, decimos en nuestras campañas.

-¿Mejoramos, en general?

-Mucho. Hoy ya no se ven tantos insultos, tantos pitidos, tanto bájate del coche. Siempre habrá, es verdad, pero son las excepción. Son muchos más las personas que destacan por el comportamiento adecuado, por el civismo y la educación en general. Todo suma. La educación vial es un aspecto más en la vida.