La inseguridad jurídica enfría el hotel balneario en el entorno de As Burgas

OURENSE CIUDAD

Santi M. Amil

Aprobado el expediente de expropiación, queda el reto de encontrar inversores

12 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La penúltima junta de gobierno del Concello de Ourense en el 2015 sirvió para desatascar uno de los proyectos más complejos que tendrá que afrontar el gobierno ourensano: la expropiación de parcelas en el entorno de As Burgas (1,5 millones). Detrás de esta maniobra que intentó, sin éxito, en dos ocasiones el anterior ejecutivo se esconde la intención de convertir las inmediaciones de los emblemáticos manantiales en un centro termal de primer nivel que atraiga a visitantes. Desde hace años, se proyecta en el Plan Estratéxico Termal un hotel balneario de categoría superior que se convierta en un referente y, de paso, acabe con la eterna carencia de plazas balnearias en la denominada capital termal de Galicia.

La obtención de los terrenos es el primer paso y uno de los más fundamentales, pero no el único. La construcción de esta infraestructura hotelera necesita, obviamente, de la inversión privada para salir adelante. El concejal de Urbanismo, José Jesús Cudeiro, asegura que lograr que ese inversor se fije en las potencialidades termales de Ourense  es un reto complejo ya de por sí y que además está condicionado por la situación urbanística actual, con el plan general anulado por la Justicia y con el nuevo pendiente de la negociación política para sacarlo adelante. «Todo dependerá de la gestión. Es un proyecto con un estudio de detalle aprobado que dice donde va cada equipamiento. ¿Habrá balneario? Todo ese ámbito está recurrido y se volverá a recurrir y estaremos pendientes de las resoluciones judiciales aún después de aprobarse el expediente de expropiación. Está claro que tenemos un problema de inseguridad jurídica y los inversores ante esta situación se privan bastante», señaló el concejal en declaraciones a La Voz.

Esa falta de confianza que se puede generar en la zona es la que, según el concejal popular, motivó que el nuevo gobierno en minoría de Ourense se planteara dar marcha atrás en el proceso de expropiación iniciado por el anterior gobierno: «Iba por el sistema de compensación y el gobierno anterior decidió llevarlo a expropiación, que caducó dos veces y que nosotros hemos heredado y se nos ha dicho que no queríamos llevarlo adelante. No es cierto, nosotros lo que dijimos es que íbamos a tratar de llegar a un acuerdo y un consenso con los propietarios si era factible, y sino seguiríamos con las expropiaciones. Con algunos era factible ese acuerdo, pero con otros era imposible porque estaban cerrados a cualquier entendimiento. Por eso retomamos el expediente y se ha aprobado en plazo», explicó el concejal de Urbanismo de Ourense.

La antigua cárcel

La joya de la corona en el proyecto termal de As Burgas pasa por ser la construcción de un hotel balneario de lujo en las instalaciones de la antigua cárcel de la calle Progreso. Así está incluido en el plan termal y en el estudio detalle que se ha desarrollado. El anterior gobierno del PSOE llegó a anunciar en un encuentro con supuestos inversores interesados en México que se licitaría en enero del 2014. De momento, sigue a la espera.