Con el nuevo proyecto, que abre el acceso unos metros más arriba de la avenida de Buenos Aires, se logra reducir el desnivel en hasta un 12 %. Para sacar adelante este proyecto fue necesario que la Xunta aprobara una modificación puntual del plan de urbanismo del 2003. Precisamente su anulación por sentencia judicial supuso una nueva traba para que la actuación pudiera ejecutarse con mayor rapidez.