Un juzgado de lo penal señala siete casos de similar perfil en una mañana
28 may 2014 . Actualizado a las 07:10 h.En una misma mañana y en un mismo juzgado de lo Penal pueden coincidir, como ocurrió ayer en Ourense, hasta siete asuntos relacionados de una u otra manera con la violencia en las relaciones de pareja. No hay un solo día sin casos de este tipo. Sirva la jornada del martes como ejemplo. Han sido tres conformidades, tres suspensiones y un séptimo caso en el que se celebró la vista oral y en el que la representante del ministerio fiscal mantuvo la acusación sin cambios.
El caso de Francisco A. L. es del día 1 de este mismo mes. El acusado, de 42 años y con tres hijos de edades comprendidas entre 13 y 7 años, maltrata de forma continuada a su esposa, de acuerdo con el escrito de acusación al que prestó conformidad. Insultos, patadas y tortazos, dice el fiscal. El último episodio incluyó un golpe en la cara, en el domicilio de Cualedro. Aceptó ayer el imputado un año y seis meses de prisión, 57 días de trabajos en beneficios de la comunidad y cuatro años de alejamiento.
Con un cinturón
También se conformó Ramón S.C., de 58 años, con 57 días de trabajos en beneficio de la comunidad y seis meses de alejamiento. El suceso se produjo el día 1 de marzo del 2013. Ese día apretó con su cinturón el cuello de su esposa en la vivienda que ocupan en la avenida Marcelo Macías de Ourense. La presencia de la policía, alertada por una vecina que a su vez se percató de lo ocurrido por uno de los hijos menores de edad del matrimonio, puso fin al altercado. La perjudicada se negó a ser reconocida y no quiso intervenir en la tramitación de las diligencias.
La tercera conformidad del día es la de Severino S.S., un hombre de origen marroquí que es marido y tutor de una mujer que está judicialmente incapacitada y físicamente muy limitada, según hacía notar el fiscal en su escrito de acusación. Viven en el municipio de Vilar de Barrio.
En este caso, el ministerio público le atribuía encerrarla en su habitación, someterla a diferentes vejaciones, agarrarla por el cuello y zarandearla. Aceptó el imputado un año y nueve meses de prisión, aparte de la privación de la tutela durante el tiempo que dure la condena.
La acusación a Teresa M.P. también es por un delito de malos tratos en el ámbito familiar. Y aunque la fiscalía aprecia como atenuante la situación mental de la acusada, solicita una condena de dos meses de trabajos en beneficios de la comunidad, seis meses de privación del permiso de armas y prohibición de acercarse durante seis meses a menos de cien metros de la casa de su madre.
Cuchillo y patadas
El episodio que da lugar a este caso se produjo el 9 de julio del 2013. Regresaba la acusada del centro del día del hospital Santa María Nai cuando se dirigió a su madre, le reprochó que no la quería y la insultó, para, a continuación, agredirla con un cuchillo de cocina. La pinchó ligeramente en el pecho, la zarandeó, le tiró las llaves del coche al pecho y le dio patadas.
crónica la violencia en las relaciones familiares