Un monasterio muy repartido

Jesús Manuel García OURENSE/LA VOZ.

OURENSE CIUDAD

20 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

La desamortización de Mendizábal, en el primer tercio del siglo XIX, trajo, entre otros efectos, la desmembración del monasterio de Montederramo, que pasó a manos de diversos propietarios. Y menos mal que, a pesar de ello, no desapareció del mapa. Hoy vemos un espléndido conjunto, menor de lo que fue, cuya iglesia sin par fue cedida por el Obispado de Ourense al concello por 30 años para restaurarla y devolverle el culto así como hacer conciertos. La sala capitular también fue cedida a la institución municipal. El claustro grande o reglar acoge el colegio público, después de haberse hecho el Ayuntamiento con varias propiedades particulares en que estaba dividido este monumento en los años setenta. El espacio fue cedido a la Consellería de Educación para tal actividad.

En el claustro da Hospedería, de 1575, hermoso conjunto renacentista, una parte de la zona este es una vivienda que lleva años en venta. Al sur está el amplio y vetusto espacio que ocupó en los últimos años la rectoral, cedida al Concello, el cual entregó al Obispado una vivienda nueva encima del centro de salud para el párroco.

El espacio que pasa a mano municipal es una planta baja y otra alta. La primera tiene 85 metros cuadrados, la alta 247 de estancias y 77 metros cuadrados de pasillos. Este espacio corre por el sur y parte del oeste del claustro hasta encontrarse con la vivienda ruinosa de un propietario que obviamente no vive allí. Por el norte sigue esta vivienda que enlaza con el restaurante del alcalde. Y aún hay otro trozo privado. Esta cesión de la rectoral data de 1993 siendo obispo José Diéguez. En 1974 fue cedida la sala capitular, 70 metros cuadrados que costaron 61.000 pesetas.

En 1951, el BOE publica la declaración de este monasterio como monumento histórico artístico. A principios de los años 60, surgió una fuerte polémica pues estando Vigo recién nombrada por la Santa Sede como co-cabecera diocesana con Tui, el alcalde quería una catedral para aquella ciudad. Y pensaron en llevarse piedra a piedra la majestuosa iglesia de Montederramo, ejemplo de la arquitectura herreriana en Galicia. Los vecinos se unieron y dejaron clara su oposición. Al final aquella idea no prosperó.

El 18 de septiembre de 1992 el Concello propone al Obispado que le ceda el templo y el patio de la Hospedería. Ya el obispo Ángel Temiño, el 29 de enero de 1979, se había mostrado favorable y el 13 de junio de 1975 aprobaba ceder el templo. Pero alguien no hizo los deberes.

Así, el 30 de marzo de 1993, monseñor Diéguez Reboredo concede por 30 años la iglesia con la condición de «no celebrar actos que desdigan del carácter de templo católico». De esta concesión hay otro documento episcopal del 22 de septiembre del mismo año. El Concello, con Patrimonio, recuperó felizmente el templo con importantes actuaciones. Hoy ya está necesitando una nueva reforma de las cubiertas por la mala calidad de las tejas.