El rey del empate aguarda al Arousa arropado por más de mil aficionados

Pablo Penedo Vázquez
pablo penedo VILAGARCÍA / LA VOZ

O CARBALLIÑO

MIGUEL VILLAR

El Arenteiro se hace fuerte en su campo de O Espiñedo, como descubrieron Barco y Fabril

15 nov 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

La trayectoria del Arousa, invicto las nueve últimas jornadas, y la situación clasificatoria del Arenteiro, decimocuarto en la tabla, podrían llevar a más de un aficionado vilagarciano al equívoco de pensar que el conjunto que dirige Rafa Sáez tiene este domingo en O Carballiño ante sí una perita en dulce para seguir engordando su granero de puntos. Nada más lejos de la realidad.

Si el Arenteiro no acecha, o directamente disputa los puestos de honor y su periferia en estos momentos, es por la pesada corona que siempre lastra al rey del empate de cualquier competición a 3 puntos la victoria. En el caso del equipo que entrena el teense Gelucho, con siete igualadas en las doce jornadas de Liga consumidas, cediendo en el último mes la friolera de 7 puntos entre el último minuto y el tiempo de prolongación; en todos los casos, en campo contrario. Encajando el 3-3 final tras remontar antes del descanso un 2-0 de salida situándose 2-3 en As Pontes. Dos semanas después, el 27 de octubre, volviendo a levantar un marcador adverso a tiempo para una feliz visita intermedia a los vestuarios, pasando de un 3-0 a un 3-3 en A Magdalena, agriado con el 4-3 del Racing Vilalbés en el minuto 88. Y la semana pasada, encajando el 1-1 del Paiosaco-Hierros en el 91, tras ir ganando los de O Carballiño desde el minuto 5.

Jugar sobre la hierba natural de O Espiñedo no está siendo beneficioso para prácticamente ningún conjunto visitante. En su campo, el Arenteiro ha derrotado al recién ascendido Estradense (2-1), y al Silva (2-0), otro de sus hoy rivales en la zona media-baja de la clasificación. Fue antes de terminar en tablas sus tres primeros compromisos de la temporada como local, 1-1 con el Barco (tercer clasificado) en la primera jornada de Liga, 0-0 delante del Deportivo B (cuarto), y de nuevo sin goles, en su duelo con el filial del Lugo, el Polvorín. El Arzúa, hasta hoy equipo revelación del presente campeonato del grupo gallego de la Tercera División, se convertía, dos semanas atrás, en el primer visitante en llevarse los 3 puntos en juego de O Espiñedo este curso, con un 0-2 que doblaba el aún así exiguo actual balance de goles en contra de los de Gelucho como locales: 4.

En la fortaleza como anfitrión del Arenteiro parece tener mucho que ver su fuerte respaldo social. En unos 1.200 espectadores de media cifra el club ourensano la asistencia a sus partidos de Tercera esta temporada. Un apoyo previsto por la directiva de Paco Fernández dado el comportamiento de su masa social la campaña anterior, a la que quiso corresponder con una plantilla confeccionada para pelear por la promoción.

La lluvia impedirá jugar en Baltar, y se busca alternativa

El lunes el presidente del Arousa, Manolo Abalo, confirmaba que el próximo partido como local del equipo vilagarciano se jugaría en el campo del Portonovo, Baltar, obligado por las obras de reforma integral de la grada de preferencia del estadio de A Lomba. Las fuertes y persistentes lluvias, y su incidencia sobre el terreno de juego, han llevado al Portonovo a trasladarle al Arousa que finalmente no podrá emplear Baltar el domingo 24 en la visita del Alondras. El club trabajaba ayer en encontrar una alternativa.

Trapero y Adrián Gómez, en la lista de Galicia para el preparatorio con el Compostela

Dos futbolistas del Arousa participaron esta semana en la tercera sesión de entrenamiento de la selección gallega de fútbol aficionado que, bajo la dirección de Iván Cancela, prepara su participación en la primera fase de la Copa de las Regiones Uefa, del 6 al 8 de diciembre en los campos de Baltar, Novo San Pedro y Salvador Otero. El lateral Adrián Gómez y el central Trapero se ejercitaron el martes en el campo caldense de As Corticeiras.

Los dos, Adrián Gómez y Trapero, figuran también en la convocatoria de 22 futbolistas que ayer hacía pública Iván Cancela para el primer partido de preparación programado por el cuerpo técnico del combinado gallego. Será el próximo miércoles, día 20, en el Campo Municipal de Santa Isabel de Santiago. El rival, el Compostela, actual segundo clasificado de la Liga de Tercera. Javi Rey, delantero lugués del Arenteiro, rival arousista este domingo, será compañero de Adrián Gómez y Trapero con la camiseta de Galicia.

Una plantilla confeccionada para jugar la promoción, pendiente de Pablo Lede

«No último partido de Liga na casa rexistramos 1.204 espectadores. ¡Iso é un mundo de xente! Temos 1.209 socios. Por iso queriamos regalarlle ao Carballiño unha boa tempada», declaraba ayer el presidente del Arenteiro, Paco Fernández. «O meu obxectivo era xogar a vindeira fase de ascenso. Pero vexo que está imposible co Fabril, co Ourense C.F., co Compos, co Arousa, co Alondras...» Así las cosas, el mandatario del próximo rival arousista fija ahora su mira a largo plazo en «quedar entre os seis ou sete primeiros» al término de la Liga.

El grado de acierto de las perspectivas de Fernández lo dirá el tiempo. Hoy lo único cierto es que el Arenteiro dispone de una plantilla de plenas garantías para estrechar los 9 puntos de diferencia que mantiene con el Arousa, quinto. Con fichajes en verano como el del central Toño Vázquez, procedente del Salamanca de Segunda B. O el del centrocampista exCelta B Pablo Lede, que lleva dos semanas trabajando con el equipo de O Carballiño aguardando la llegada del tránsfer desde Italia, donde compitió las dos últimas temporadas en su categoría de bronce, sin descartarse su presencia en el encuentro con el Arousa.

Los que no lo jugarán serán el central David Suárez ni el mediocentro Emilio, por sanción. En el Arenteiro confían en ver ya en plenitud de condiciones a Wadir, punta incorporado dos semanas atrás del Ourense C.F., y que se suma a Javi Rey, Mitogo y Joni en el arsenal ofensivo en el 4-3-3 de Gelucho, con los 195 centímetros de altura del pivote Ross como baza a balón parado.