Ni siquiera los pedristas están plenamente satisfechos debido a la falta de ourensanos en la cúpula federal
20 jun 2017 . Actualizado a las 05:00 h.«Pois aquí, por Madrid, asistindo a un curso de costura con machada. Os militantes que non apoiaron a Pedro non deben estar pagando a cota». Es difícil definir de manera más elocuente el estado de ánimo de una parte considerable del PSOE ourensano, la que apoyó a Susana Díaz, tras lo ocurrido en el congreso del fin de semana. El entrecomillado pertenece a Adolfo Nogueira, concejal socialista en O Carballiño, que quiso manifestar así en las redes sociales su malestar con el modelo de partido de Sánchez.
Y no es el único desanimado. «Da la sensación de que este ha sido un congreso más de revancha que de mirar adelante. Un 40 % del PSOE ha quedado silenciado», señala la secretaria de Organización del partido en la provincia, María Quintas, que cree que esa etiqueta de un «nuevo PSOE» es un error: «Tenemos 140 años de historia con nuestras luces y nuestras sombras y no vamos a renegar de nuestro partido, ni yo ni muchos otros».
Por otra parte, ni siquiera los seguidores más convencidos de Pedro Sánchez durante las primarias han quedado plenamente satisfechos con el resultado del congreso del pasado fin de semana, especialmente en la capital ourensana, que se ha quedado sin representantes en los principales órganos del partido a nivel estatal. Esa circunstancia ha sorprendido a más de uno ya que se daba por hecho que la diputada Rocío de Frutos, una de los quince del no a Rajoy, tenía posibilidades de entrar incluso en la ejecutiva federal de Sánchez. No ha sido así pese a la intensa actividad de la ourensana en la vida interna del partido durante las últimas semanas. Ahora, sin embargo, tomará distancias. «No voy a volver a opinar nunca más de cosas orgánicas. A partir de ahora me dedicaré únicamente a mi trabajo en el Congreso», era lo único que quería decir ayer Rocío de Frutos, a la que sí podría esperar algún tipo de recompensa dentro del grupo parlamentario que dirigirá Margarita Robles.
Pablo López Vidal, secretario de Organización del PSOE en la capital ourensana, que apoyó a Pedro Sánchez, restaba ayer importancia a la ausencia de afiliados de la ciudad en la ejecutiva y en el comité federal. «Eu do congreso o que destacaría é o ambiente de ilusión e de cambio profundo que reinaba alí», señaló el exdiputado autonómico, que rechaza las críticas a la falta de integración. «Non ían meter, por exemplo, a María Quintas, que non se identifica con este proxecto».
La aludida decía ayer, en todo caso, que «es la primera vez que la capital no tiene representación en el comité federal pese a que hubo importantes referentes que apoyaron a Pedro Sánchez». Quintas cree que la única ourensana seleccionada para ese órgano -Bibiana Iglesias, concejala en San Cibrao das Viñas- está «tan cualificada como otros, pero se echan en faltan personas con más representación social».
Es, precisamente, Iglesias la que ayer hablaba con más satisfacción de la nueva cúpula federal del PSOE. «Es una alegría y un orgullo formar parte de un proyecto y de un modelo de partido en el que creo», dijo la concejala, que rehuyó las críticas. «Galicia está muy bien representada. Todo lo demás son opiniones y en la vida nunca puede estar todo al gusto de todos», dijo Iglesias, que añadió que «hablar en clave de bandos ya no es lo adecuado».