O Barco, Carballeda de Valdeorras y Rubiá piden la declaración de zona catastrófica
O BARCO DE VALDEORRAS
El pleno barquense aprobó la reclamación por unanimidad
20 jul 2022 . Actualizado a las 20:10 h.El pleno de O Barco de Valdeorras aprobó por unanimidad pedir la declaración de zona afectada gravemente por una emergencia de Protección Civil, la actual nomenclatura de lo que popularmente se conoce como zona catastrófica. Es una solicitud que después se traslada al Gobierno de España, que es quien tiene la potestad de admitirla o no. Es el paso fundamental para conseguir ayudas para los afectados por los incendios, no solo los privados sino también el propio ayuntamiento. «É preciso que as entidades públicas poñan en marcha un conxunto de accións e medidas de axudas dirixidas ao restablecemento da normalidade», dice el texto del acuerdo que leyó el portavoz del gobierno local, Tino Alonso.
El portavoz del BNG, Suso Vilasánchez, quiso hacer una defensa de las visitas que los políticos están haciendo a la comarca. Remarcó que se trata de una muestra de sensibilidad, porque no es lo mismo que te cuenten lo que está pasando que verlo directamente. El edil de Riada Cidadá, Félix García, pidió que se consensúen las peticiones con el resto de concellos afectados. Y pidió insistir en la limpieza de las franjas alrededor de las aldeas. Carlos Crespo, del PP, quiso destacar la labor de los medios de extinción y también de los propios vecinos, que en muchos casos fueron los que salvaron los pueblos.
O Barco fue el primero en llevarlo al pleno, a primera hora de esta mañana. En breve lo harán también Carballeda y Rubiá, según apuntó el alcalde, Alfredo García, en la sesión. Aseguró que el tema ya había sido consensuado con los representantes políticos de ambos concellos el día anterior. «Quedamos en firmar los tres, pero después la tarde fue una vorágine», explicó. En todo caso, aseguró que a lo largo de la mañana hará llegar el documento final a ambos regidores. «Sí hemos estado trabajando en colaboración entre los tres», decía García.
El fuego iniciado el jueves en la parroquia de Riodolas en Carballeda sigue avanzando, aunque esta mañana está todo mucho más tranquilo, tras los momentos de tensión vividos años en A Medua y Viladequinta.
El balance oficial de la Consellería de Medio Rural indica que hay 7.500 hectáreas quemadas. Sigue decretado el nivel 2 de alerta por la proximidad de las llamas al núcleo de Candeda (Carballeda).
Necesidad de un cambio de modelo
En la sesión, García aseguró que el fuego puso de manifiesto la importancia de las medidas de prevención previas. Aseguró que desde el Concello de O Barco se enviaron 3.000 cartas a otros tantos propietarios para que limpiaran sus fincas. «Y se hizo, pero tampoco hay medios privados suficientes y estaban todos trabajando a tope», apuntó, consciente de que no todos los propietarios cuentan con los medios para hacer los trabajos de desbroce si no es contratando a un profesional. «Si hubiéramos tenido un mes más... pero ahora ya se limpiaron todas», recalcó. Insistió en lo dicho la víspera, durante la visita del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a Alixo. «Tenemos que poner en valor los terrenos junto a los pueblos», insistió, asegurando que su idea es compartida por el conselleiro de Medio Rural, José González. Reclamó un cambio en el modelo de gestión para que las tierras «a monte» puedan ser trabajadas por personas diferentes a los propietarios. «Es el momento, ahora que quedó todo limpio», insistió.
García hizo alusión al pueblo de Vilariño, donde no salió adelante el plan de crear una aldea modelo. Se preveía un proyecto para reunir 20 hectáreas de terreno y dedicarlas a plantar viñas. «Pero la gente no fue a firmar», recalcó. Y el proyecto se quedó en nada. «Ahora ya se quemó todo», remarcó. Pidió a los poderes públicos valentía para tomar decisiones, que serán criticadas por algunos, pero que le gustarán a la mayoría, dijo.
