La afluencia a la cita vinícola aumentó en horario nocturno al bajar las temperaturas
10 jul 2022 . Actualizado a las 22:31 h.El calor de este fin de semana provocó que la asistencia al recinto de la Feira do Viño de Valdeorras fuera discreta a mediodía mientras que, por la noche, con la bajada de las temperaturas, se multiplicó la presencia de público constatando que eran muchos los que, tras la pandemia, tenía ganas de celebrar. La praza de Viloira, en O Barco, estaba abarrotada.
Entre los asistentes destacaba la gente joven, de entre 20 y 30 años, un público que tradicionalmente se le resistía a la feria antes del covid pero que, en esta edición, se volcó con la cita.
El consello regulador quiso ir más allá de las casetas de las bodegas con sus vinos y por eso el programa paralelo de actividades ofrecía muchas opciones. Hubo diferentes catas, algunas ligadas a diferentes productos agroalimentarios. Las plazas de las cinco actividades de degustación se agotaron.