La carretera de circunvalación de O Barco tendrá un enlace a la A-76 en Vilobal
O BARCO DE VALDEORRAS
El proyecto de la carretera de circunvalación de O Barco, también llamada carretera de la pizarra porque evitará la entrada de los camiones procedentes de las canteras en el casco urbano, ya está en el Concello. El proyecto «está muy avanzado», según anunció ayer el regidor, Alfredo García, tras haberlo presentado en la comisión de obras.
«Se van a cumplir los plazos, y va a estar rematado para final de año», dijo, para después avanzar que «en verano saldrá a información pública, con el trazado definitivo y las parcelas afectadas». Será entonces cuando los propietarios conozcan si van a ser expropiados, y puedan entonces presentar las alegaciones pertinentes.
La carretera, de 5,7 kilómetros, partirá en el enlace con el acceso a Casaio (en Carballeda de Valdeorras) para ir siguiendo la actual N-536 hasta la altura de Millarouso (en O Barco), «aunque se suavizarán las curvas», apuntó el regidor barquense. De ahí arrancará un puente que superará el río Sil, la vía del tren y la carretera de Éntoma; para después entrar en túnel durante más de 500 metros y salir «por debajo de O Serro», según explicó García. Finalmente llegará hasta el acceso al casco urbano barquense por Vilobal, de donde saldrá un puente hacia la N-120. «No solo se han limitado a resolver el enlace a esta carretera, sino que queda definido el de la A-76», reseñaba García.
El entronque de ambas vías con la actual N-120 se hará a través de una glorieta. Será una gran glorieta en altura, que dejará a la autovía (la actual N-120) debajo. Aunque inicialmente se pensó en hacer dos rotondas de acceso, una a cada lado de la carretera, con una grande sobre la calzada «se coge menos espacio y creemos que se salvan las casas» que de otra forma estaría afectadas, según los datos que aportó García. Defendió también que con estos cambios no se perderán viviendas en A Barxa, «y quedan garantizados» los accesos a fincas en Vilobal.
Todavía sin datos cerrados sobre la mesa, el alcalde (que presentó el proyecto junto al edil de medio rural, Luis Arias) reseñó que «superará los cálculos», que estaban cifrados inicialmente en 30 millones de euros. Sobre todo, teniendo en cuenta también que «son laderas inestables que tienen que llevar protecciones muy fuertes».
El proyecto del trazado saldrá a información pública este mismo verano