Arqueólogos trabajarán en el yacimiento desde julio y durará cuatro años
28 jun 2019 . Actualizado a las 08:23 h.La historia del mítico castillo de Lobarzán, a medio camino entre los municipios de Monterrei y Oímbra, volverá a revivir a partir de la primera semana de julio. Un convenio de colaboración entre la Universidad de Vigo y los concellos de Oímbra y Monterrei, permitirá realizar durante cuatro años, diferentes actuaciones de recuperación del patrimonio y de puesta en valor del área etnográfica, patrimonial y paisajística de todo el entorno. El coste del proyecto, financiado por el Leader, superará los 46.000 euros.
Se trata de un conjunto arqueológico insólito en Galicia. Inicialmente hay indicios de que durante tres milenios hubo asentamientos humanos. La zona fue poblada desde la prehistoria hasta la construcción y posterior desaparición de un castillo medieval hacia el siglo XV. Nunca se excavó en esta zona situada en plena montaña, en un paraje de difícil acceso.
La actuación será dirigida por Beatriz Comendador. El director de intervención, Víctor Rodríguez Muñiz, destacó: «Trátase dun enclave único en la comarca que ten una enorme riqueza no solo patrimonial, senón tamén paisaxística e botánica. O máis significativo é que foi unha zona ocupada durante un espazo moi prolongado no tempo».
En esta primera fase del trabajo de campo tomarán parte nueve personas. «Seremos sete arqueólogos co apoio doutros dous profesionais que se adicarán a limpeza intensiva dalgunhas zonas, sempre dun xeito respectuoso co entorno», expuso Rodríguez Muñiz.
Determinar la estructura
Uno de los objetivos esenciales de la actuación, según este arqueólogo será: «
Determinar exactamente a estrutura do vello castelo medieval. Hai unha parte ínfima do que foi o edificio, existen pedras que formaron parte dos muros da fortaleza. Esa é unha das prioridades deste traballo de prospección
». A más largo plazo, en años venideros, se pondrán en marcha actuaciones complementarias como la difusión y la puesta en valor de las prospecciones efectuadas.
Se trataba de un espacio privilegiado desde el punto de vista defensivo. Desde ese punto se controlaba visualmente todo el valle de Monterrei y el Búbal. Era una zona fortificada y poblada desde épocas remotas. Una de las novedades del proyecto es que este extraordinario yacimiento apenas ha sido investigado y hay pocas referencias a su historia y evolución. Rodríguez Muñiz expuso: «Farase unha serie de fotografías realizadas con un dron e unha limpeza de la maleza de ese punto como primeira fase do proxecto. Levaranse a cabo dúas catas arqueolóxicas e prospección nesa zona».
Los promotores de la iniciativa quieren que a ella se sumen los vecinos de la zona y que sean partícipes. De ahí que los días 28 de junio y 5 de julio, justo antes del inicio de la intervención arqueológica, se vayan a celebrar dos asambleas informativas sobre este proyecto. La primera en el Lagar de Barrocas, en Oímbra y la segunda en el centro social de Alameda, en Vilaza.