Arqueólogos buscarán en el castillo de Lobarzán restos de sus tres milenios de ocupación
MONTERREI
Los trabajos de investigación se estiman en cuatro años
05 abr 2019 . Actualizado a las 21:07 h.Cuatro años es el tiempo durante el cual se llevará a cabo un estudio arqueológico, paisajístico y patrimonial del castillo de Lobarzán, el Castro das Laxes das Chás y su entorno.
La arqueóloga Beatriz Comendador, de la Universidad de Vigo, encabezará el equipo que llevará a cabo las investigaciones sobre el terreno tras la firma del convenio colaborador entre los concellos ourensanos de Oímbra y Monterrei -donde se localiza este enclave- y la entidad académica. «Con estes traballos teremos unha visión máis definida dos restos que hai na superficie pero tamén das estruturas que non coñecemos e que están a máis profundidade. Ademais que sabemos que houbo importantes ocupacións en diferentes momentos históricos. Non só na época medieval», destacó Comenda. «Cremos que é unha ocasión especial para coñecer todos os valores que se vinculan a este xacemento á vez que recuperamos o espazo e o facemos máis entendible e comprensible para todos aqueles que se queiran achegar», añadió.
La decana de la facultad de Historia, Susana Reboreda, hizo hincapié en la importancia del convenio por la interacción que supone para sus profesionales con el medio que lo rodea. «Eu concibo a facultade de historia como un pequeno gran centro. Pequeno polo seu tamaño, porque figuramos entre os máis pequenos da universidade, e grande pola súa ampla actividade. Somo un centro que desenvolvemos unha actividade moi dinámica grazas aos profesionais cos que contamos», destacó la máxima responsable de la facultad.
«A nosa previsión é que podamos comezar a traballar no mes de xullo, pero os trámites administrativos ás veces son un pouco máis lentos do estimado nun principio», explicó Comendador sobre el proyecto que ella dirigirá.
Al acto también asistieron el rector de la universidad, Manuel Reigosa, y los alcaldes de Monterrei, José Luis Suárez, y Oímbra, Ana María Villarino. Estos últimos afirmaron que la investigación puede suponer un empuje para las comarcas, más allá de su actividad agrícola, y que puede potenciarlas turísticamente.
El proyecto de intervención que se llevará a cabo tendrá dos fases diferenciadas, según resumió la arqueóloga responsable. En la primera etapa se llevará a cabo una prospección del lugar y su entorno, haciendo un amplio análisis de la configuración de Lobarzán y de su relación con los yacimientos del entorno. En la segunda etapa los esfuerzos se centrarán en la intervención del terreno en sí.
«É un enclave único no Támega, cunha unión de valores a protexer», finalizó la directora de la campaña.