Dos millones de personas son el público potencial del parque acuático

Cándida Andaluz Corujo
cándida andaluz OURENSE / LA VOZ

MONTERREI

Santi M. Amil

La consultora que da forma al proyecto prevé visitas desde León, Zamora y Portugal

31 ago 2018 . Actualizado a las 11:46 h.

Los ourensanos no podrán disfrutar del parque acuático, por lo menos, hasta finales del año 2020. Acaba de comenzar un largo período de tiempo en el que todavía faltan por definir, entre otros aspectos, el estudio preliminar que permitirá decidir a la empresa encargada del proyecto aspectos tan importantes como elegir unas u otras atracciones y delimitar el público objetivo al que irá dirigido este lugar de ocio. Lo que sí es una realidad es su ubicación en Monterrei, Pereiro de Aguiar, en las instalaciones con piscinas que gestiona la Xunta.

Yexian Rubio, del departamento comercial de la consultora Amusement Logic, encargada del proyecto ourensano, destaca: «El espacio para construir el parque acuático es muy bueno, así como su ubicación. Dispone de un buen acceso, es cercano a un núcleo urbano importante como es Ourense, cuenta con suficientes metros cuadrados para poder distribuir de forma funcional atracciones, infraestructuras y zonas de esparcimiento». Indica que en este caso se trata de un entorno natural que permite aprovechar espacios con sombra natural para las zonas de descanso -muy demandados en aquellos lugares con altas temperaturas-, así como lugares más despejados que se pueden utilizar para incluir las atracciones. Y cree que el hecho de que las piscinas de Monterrei sean ya conocidas y visitadas por los ourensanos será muy positivo a la hora de su puesta en marcha. «Una de las cosas más importantes de Monterrei es que ya es un espacio en funcionamiento, con lo cual la experiencia nos dice que potenciando sus instalaciones conseguiremos atraer a más público. El ejercicio más importante en esta fase -la del anteproyecto- es el de crear un espacio funcional en todos los sentidos, por lo que probablemente las actuales piscinas sean rediseñadas», añade. Una de las labores de la empresa Amusement Logic es conocer quiénes serán los futuros usuarios del parque acuático de Ourense. «En un radio de 90 kilómetros, existe un población de alrededor de dos millones de personas. De este total, el estudio nos dirá cuál es el público objetivo y nos permitirá estimar una cifra de entradas anuales. Evidentemente los accesos por carretera no serán los mismos desde todos los lugares, pero esta cifra nos da un global interesante para la viabilidad del parque», explica Yexian Rubio. La consultora valenciana prevé que a Ourense vengan usuarios desde Santiago, Lugo, Pontevedra, norte de Portugal e, incluso, de las provincias de Zamora y León.

Esta primera fase tratará de dirimir la viabilidad del proyecto y establecer las bases para su fase constructiva. Un estudio pormenorizado permitirá concretar los aspectos más importantes y, sobre todo, hacer atractivo este espacio no solo para los ourensanos sino para los vecinos de toda Galicia y de provincias cercanas.

Posteriormente a esta fase, se realizará el proyecto final y habrá que ejecutarlo. Comenzarán unos plazos que se alargarán en el tiempo y que dependerán, también, de la parte más administrativa. «Esto no es posible en menos de un año y teniendo en cuenta los trámites a seguir por la administración, el tiempo casi se duplica. Por lo tanto, deberíamos pensar a dos años vista. Está primera fase tiene como fecha tope final del 2018», relata.

Su mantenimiento se llevará una buena parte del presupuesto de explotación

Saber cuáles serán las atracciones que se instalarán en Ourense es una incógnita. Se decidirán una vez que se tengan claros otro tipo de datos como el público objetivo o la delimitación de las zonas. «Hay unas atracciones que sabemos que tienen más éxito que otras pero, en este caso, lo importante será dimensionarlas de forma que la experiencia de los visitantes sea lo más agradable posible. El estudio preliminar nos permitirá decidir sobre unas u otras», subraya Yexian Rubio. Se sabe que las obras tendrán un coste de seis millones de euros, según anunció la Xunta, pero el mantenimiento de un parque se lleva una parte importante del presupuesto de explotación, por lo que será una partida a tener en cuenta. «En este momento y sin haber realizado un estudio, es difícil aproximar una cifra ya que dependerá de las atracciones, equipos y demás». Hay que tener en cuenta, afirma Rubio, que esta primera fase tratará de dirimir la viabilidad del proyecto y establecer las bases para su fase constructiva. Su experiencia en la instalación y puesta en marcha de proyectos de este tipo de instalaciones por toda España, le lleva a afirmar que el éxito no reside tanto en el tamaño total de las instalaciones o en la magnitud de las atracciones que allí se ubiquen sino en una buena gestión por parte de las personas que finalmente se hagan cargo de su funcionamiento. Que sepan adaptarse con el tiempo al público objetivo y que ofrezcan los mejores servicios en las mejores condiciones. «Con estos trabajos iniciales se pretende dotar de datos y herramientas para que así sea», recalca Rubio.