Una noche de heladas arrasa las tres cuartas partes del viñedo de Monterrei

p. seoane / m.cobas / l. díaz OURENSE / LA VOZ

MONTERREI

Santi M. Amil

El impacto en las otras tres denominaciones del interior de Galicia ha sido desigual

28 abr 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Sin las altas temperaturas de las últimas semanas, que en algunas zonas provocaron un adelanto del ciclo vegetativo de la vid en más de un mes, una helada como la de la noche del miércoles al jueves hubiera hecho daño, pero caería dentro de lo más o menos previsible. De hecho, hasta el miguelete, el 8 de mayo, a nadie sorprende, aunque duela más o menos, una helada. El mes de abril del 2017 ha sido tan diferente que una única helada, antes incluso del pedrete, el 29, ha dejado de luto grandes superficies de viñedo en Galicia, particulamente en Ourense, y señaladamente en Monterrei. Que se haya perdido un 75 % de la cosecha en esta comarca es una posibilidad que apunta Miguel López, el responsable técnico del consejo regulador de una zona donde viticultores con muchos años de dedicación no recuerdan daños por heladas como los de esta ocasión. Arrasó a feito, sin que siquiera haya establecido diferencias por variedades en función del distinto ciclo vegetativo de unas y otras

En O Ribeiro, con las reservas propias de quienes por su experiencia saben que una meteorología favorable -sumada a tratamientos adecuados de la planta- permitirá recuperar parte de lo dañado, la helada se ensañó en el Avia, donde, en las partes más bajas, se puede haber perdido el 100 %, mientras que en las zonas intermedias se salvará hasta un 40 %. En el resto de la denominación, el impacto ha sido mucho menor, alejado del negro manto que ayer caía desde Beade, corazón del desastre

El presidente del consejo regulador, Felicísimo Pereira, con viñedos repartidos en las distintas zonas, dice que en alguna los ha perdido todos, en otra salva la mitad, en otra perdió una única cepa y en las que están en la ribera del Miño no hay daños. En conjunto, se puede estimar una pérdida del 30 % en la primera denominación de Ourense

El resultado final, sea como fuere, aún depende de la regeneración de la planta. Esperar a que se seque lo ahora quemado, cortarlo, tratar con sustancia cicatrizante y algún bioestimulante para recuperar las yemas latentes, con el objetivo final de salvar la planta, es el camino que ahora apuntan los más perjudicados. De todas formas, una parte importante de la cosecha, sobre todo en Monterrei y en el ribeiro del Avia, Gomariz abajo, está perdida

En Valdeorras, también los daños se concentran en la viñas de zonas más bajas, próximas al río, mientras que las situadas en laderas o espacios altos han salido indemnes de este capricho meteorológico. En el consejo regulador optan por la prudencia y dicen que hasta que pasen entre cinco y siete días no se podrán ofrecer datos fiables. Argumentan desde el consello regulador que, al estar todavía en fase de brotación de la uva, puede haber muchas viñas afectadas por la helada que finalmente se recuperen y la uva brote de nuevo con normalidad.

En la Ribeira Sacra los daños fueron especialmente graves en Val de Quiroga, donde los viticultores dan por perdida la cosecha. También han tenido un impacto notable en llano y en laderas poco abrigadas de Pantón, especialmente en las parroquias de reciente incorporación al consejo regulador. Viñas de Doade y Vilachá de Salvadur también se vieron afectadas, al igual que las de A Abeleda, en la parte ourensana de Ribeira Sacra.

Entre las primera reacciones institucionales, las corporaciones municipales de Quiroga y O Carballiño adoptaron ayer mismo acuerdos para reclamar la declaración de zona catastrófica en las denominaciones de Ribeira Sacra y Ribeiro, respectivamente. Igualmente, el PP de Ourense y En Marea anunciaron su intención de llevar la situación al Parlamento de Galicia para abrir un debate con el fin de analizar la posibilidad de abrir líneas de ayudas. Asaja también anticipó la intención de pedir de la Consellería do Medio Rural un estudio en ese sentido. Sugieren a los agricultores, al igual que Unións Agrarias, la conveniencia de analizar la situación y las coberturas de los seguros agrarios.

El fuego cerca viviendas en Rianxo y arrasa 50 hectáreas de monte

El fuego arrasó ayer 50 hectáreas de monte en la parroquia de Isorna. El fuerte viento motivó que las llamas se propagasen con rapidez, hasta el punto de que fue preciso cortar tres horas la carretera que va de Rianxo a Catoira debido a la fuerte humareda. Además, el fuego cercó las viviendas del núcleo de Palleiro, que no sufrieron daños. Varias personas tuvieron que ser atendidas al sufrir problemas respiratorios al inhalar humo. Al cierre de esta edición, el incendio se encontraba estabilizado, según informó ayer la Consellería de Medio Rural. Por otro lado, a última hora de ayer se declaró otro incendio forestal en Cerdeda-Cotobade. Aunque en principio no había riesgo para las viviendas, el ayuntamiento manifestó su temor a que acabase afectando a algún núcleo.