El alcalde tilda de varapalo la sentencia, que deja a las normas de 1989 como referencia urbanística
24 dic 2019 . Actualizado a las 17:50 h.Una sentencia firme del Tribunal Supremo deja sin efecto el planeamiento urbanístico municipal del Concello de Monterrei (2.809 habitantes) aprobado en febrero de 2014.
El fallo da la razón a tres vecinos, que recurrieron en casación ante el alto tribunal. Lo hicieron después de que el TSXG no atendiese su petición de anulación del PXOM en un fallo datado el 25 de junio de 2015. Ahora, sin embargo, diez magistrados de la sala de lo contencioso administrativo del Alto Tribunal reconoce carencias técnicas sustanciales en el documento que llevan a su nulidad.
El primero de esos motivos es la falta de publicidad de un resumen ejecutivo del PXOM. Según el fallo, esa deficiencia en el PXOM impide «facilitar al ciudadano el acceso a toda la información (del documento) de forma sencilla e inteligible».
La sentencia también estima otro apartado del recurso que señala que el PXOM carece de un informe sectorial -preceptivo y vinculante- por parte de la Confederación Hidrográfica del Duero.
Por estas dos causas, el fallo señala: «La orden de la Xunta de Galicia (sobre el PXOM, publicada de 7 de febrero de 2014) y el planeamiento son contrarias al ordenamiento jurídico y por tanto, las anulamos».
El alcalde, José Luis Suárez, aseguró que no saber nada de este litigio. «Puede parecer sorprendente, pero no teníamos conocimiento alguno de este recurso. De hecho, era una iniciativa legal no contra el Concello, sino contra el decreto de la Xunta que validó el PXOM en su día», explicó. Y añadió: «Esto es un varapalo tremendo que no esperábamos en absoluto. El fallo nos obliga a replantearnos toda la regulación urbanística municipal.
La Xunta no nos había comentado nada sobre esto. Ahora vamos a tener un problema enorme». La Consellería de Medio Ambiente no se pronunció ayer sobre el fallo.
El plan se aprobó hace ahora casi tres años para sustituir a las normas subsidiarias provisionales que databan de 1989. Ahora, esas antiguas normas volverán a regir el urbanismo en Monterrei.