La polémica por la retribución por asistenciafue uno de los puntos que definió el pleno extraordinario
27 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La polémica por la retribución de los concejales por la asistencia a plenos fue uno de los puntos que definió el pleno extraordinario del Concello de Xinzo celebrado ayer. La sesión ratificó con los votos del PP y pese a las críticas de Manuel Pérez, portavoz de Xinzo Adiante, y de Ramiro Rodríguez, del BNG, una retribución de 150 euros por edil por acudir a plenos, comisiones informativas, juntas de portavoces o juntas de gobierno. La socialista Elvira Lama censuró la falta de consenso para constituir las comisiones locales del Concello.
La sesión también definió el anunciado organigrama del grupo de gobierno local, con Manuel López Casas como portavoz municipal y primer teniente de alcalde y Manuel Cabas como segundo así como la retribución en concepto de dedicación parcial al edil de Cultura, Festejos, Educación y Mocidade, Luis Miguel Gil, por 1.096 euros brutos mensuales con catorce pagas anuales. Los plenos, pese a las críticas de los concejales de la oposición, también quedaron concretados con los mismos horarios y periodicidad que hasta ahora, es decir, los primeros jueves de los meses impares a las once de la mañana.
El alcalde, Antonio Pérez, defendió la dedicación parcial a Gil y remarcó que a diferencia de otros muchos ayuntamientos de la provincia, en Xinzo no habrá dedicaciones exclusivas, afirmando que él tiene «unha adicación total ao Concello, pero sen cobrar».
A Rúa
En el Concello de A Rúa no hubo polémica y todos los puntos de organización propuestos por el nuevo bipartito BNG-PSOE fueron respaldados también por el PP. El exalcalde y portavoz de los populares, Avelino García Ferradal, apuntó que fue así porque «es exactamente la misma estructura» que había con su gobierno.
Donde ejecutivo y oposición sí chocaron fue en el debate sobre el desestimiento del convenio con el ADIF (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) para la construcción de un paso subterráneo en el centro de A Rúa. El bipartito liderado por la nacionalista María González Albert defiende que esa obra no es necesaria y que supondría una gasto excesivo para el Ayuntamiento. «Lo que sería una hipoteca para el Concello es que allí hubiese un accidente una vez más», dijo el popular García Ferradal, que asegura que «todos los días pasan por las vías un montón de niños a las piscinas y personas mayores a las huertas». La mayoría absoluta que suman BNG y PSOE fue suficiente para sacar adelante la propuesta y no habrá paso subterráneo.
Montederramo
También ayer se celebró el pleno organizativo de la corporación municipal de Montederramo y el BNG, en la oposición, criticó el sueldo que se ha otorgado el alcalde, Antonio Rodríguez, del PP. Se trata de una dedicación parcial de 22.000 euros anuales, según los nacionalistas. Su portavoz, Antolín Fernández, dice que «será legal pero non é ético». A su juicio, es un salario excesivo para el regidor de un municipio como el de Montederramo, con poco más de 800 habitantes.
El BNG critica que el alcalde de Montederramo se ponga sueldo de 22.000 euros