La alcaldesa y candidata del PP en Melón irá al banquillo por falsedad documental
MELÓN
El juez de Ribadavia dicta auto de apertura de juicio oral por certificar trabajos comunitarios incumplidos de una condena
24 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La alcaldesa de Melón, María Cristina Francisco Vílchez, que es también la candidata en quien confía el presidente provincial del PP, José Manuel Baltar, para mantener la mayoría absoluta en este municipio ourensano, llegará a la cita electoral del mes de mayo con la condición de procesada. El juez de Ribadavia ha dictado auto de apertura de juicio oral y señalado la Audiencia Provincial como órgano competente para juzgarla. Acusada formalmente de un delito de falsedad documental y otro de quebrantamiento de condena como cooperadora necesaria, la fiscalía solicita para ella cuatro años y medio de cárcel, con cuatro de inhabilitación y 23.700 euros en multas.
La acusación popular, ejercida por un concejal independiente del Concello de Melón, reclama seis años de prisión para la alcaldesa, a quien también atribuye un delito de prevaricación, que, sin embargo, no ha visto el instructor de la causa.
El caso por el que ahora llega al banquillo de acusados la alcaldesa de Melón es del 2011, precisamente el año en el que Cristina Vílchez accedió a un cargo que dejó su marido, Alberto Pardellas, a quien la Audiencia Provincial inhabilitó por un delito de prevaricación relacionado con la construcción de un polideportivo al lado de un monasterio.
Tres acusados
Se había prestado el Concello de Melón a colaborar con el Servicio de Gestión de Penas y Medidas Alternativas para que un vecino condenado por un delito contra la seguridad del tráfico, David P. R., cumpliera los 22 días de trabajos en beneficios de la comunidad que le habían sido impuestos. Iba a realizar trabajos de desbroce desde el sábado 18 de junio hasta el sábado 27 de agosto, según el plan aprobado por el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria número 3 de Galicia.
El penado, según mantiene la fiscalía, «no acudió ninguno de esos once días», aunque firmó «un documento denominado ?registro de presentación? a modo de control presencial», que le fue facilitado por una auxiliar administrativa del Concello de Melón, también acusada en esta causa. Escribió la funcionaria «de su puño y letra las fechas de los trabajos nunca ejecutados» y los pasó a la firma de la alcaldesa. Ambas, sostiene el ministerio público, eran «perfectamente conocedoras de que David no había cumplido ni un solo día», pese a lo cual firmaron el documento «a sabiendas de su falsedad».
El fiscal solicita para la funcionaria y para la alcaldesa las mismas penas. En el caso del vecino que debería haber hecho los trabajos, la petición es de una multa.
Este asunto había sido advertido por una firma ourensana de detectives privados, que alertaron de la situación a la Guardia Civil, como les es exigible, al apreciar indicios de ese supuesto delito. Los efectivos del instituto armado fueron, sin embargo, los que dieron cuenta de la situación al juzgado de Ribadavia, al contrastar las sospechas.
Cristina Francisco Vílchez accedió a la alcaldía cuando su esposo, Alberto Pardellas, se vio obligado a dejarla al ser inhabilitado por la Audiencia.
El PP no ha reaccionado ante la situación procesal de su candidata en Melón.