Un buey batió récord absoluto en la Central: 10.469 euros

Javier Benito
j. benito LALÍN / LA VOZ

MASIDE

Cedida

Frigoríficos Bandeira compró el animal criado en Maside

02 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La Central Agropecuaria de Galicia retoma la senda de los récords de la que no se apeó durante todo el pasado año. En esta ocasión además rompiendo una barrera casi psicológica, la de los 10.000 euros por un ejemplar. En la puja de este pasado martes se abonaron 10.469 euros por un buey de raza mestiza, el precio más alto en la historia de la lonja de Silleda en la sección de vacuno mayor. La res creció en una explotación del municipio ourensano de Maside y tiene casi cinco años, ya que nació en abril del 2017. La firma Frigoríficos Bandeira adquirió este buey que ahora sacrificará en sus instalaciones para su posterior comercialización.

Durante la sesión también se batía otro récord histórico, en este caso del precio medio de la categoría de vacuno mayor, en buena medida por la compra de ese espectacular ejemplar de buey. Si el pasado día 8 de febrero había sido de 1.500 euros, este martes se incrementó hasta los 1.604. La cada vez mayor calidad de los ejemplares que llegan a subasta en Silleda está detrás de ese constante incremento de los precios abonados, que ya se detectó el pasado año.

En la Central Agropecuaria de este martes se adjudicaron 465 de los 484 becerros de recría a subasta, con un precio medio de 213 euros y una facturación conjunta de 99.212. Mientras, se colocaron 308 ejemplares de los 326 de vacuno mayor, por una cuantía media ya citada de 1.604 euros, sumándose en el conjunto de las ventas de esta sección una cantidad de 494.168. Por último, los 89 de 99 ejemplares de terneros carniceros que llegaron a la lonja se abonaron a una media de 849 euros, con un montante global de 75.635.

Alza del porcino cebado y lechones

Respecto a las mesas semanales de precios, hubo ligero repunte del cerdo cebado en todas sus categorías y en 2 euros por unidad de los lechones, mientras también cotizaron al alza los huevos y las gallinas de desvieje, repitiendo el conejo en Madrid.