Ourense: «En 30 años nunca tuve tanta demanda de piscinas en Lugo», dice un constructor

El coronavirus ha transformado formas de vida y de pensar. El mundo empezó a girar a ralentí y fueron muchos los que entraron en una crisis existencial y lograron averiguar cómo y dónde querían vivir. Desde que terminó el confinamiento, la demanda de fincas, casas o pisos con balcón se asentó en las inmobiliarias de toda la provincia de Lugo y, con total certeza, en todo el globo terráqueo. Pero con el virus aún en el aire, también fueron muchos los que decidieron que tener la piscina en casa era más seguro que ir a la playa o al río. Por eso, la demanda aumentó tanto que, en algún momento, el mercado colapsó y no pudo abastecer a todas las empresas.