La nieve caída todavía no permite abrir la estación de esquí de Cabeza de Manzaneda

La intensa nevada caída el lunes todavía no permite abrir la estación de esquí de Cabeza de Manzaneda a la práctica deportiva.

Con las imágenes del manto blanco que cubría las instalaciones, los deportistas comenzaron a interesarse por la apertura de los remontes, los telesillas y las pistas para poder disfrutar de la nieve; pero todavía no es posible. «De momento los espesores acumulados no permiten abrir la estación a la práctica de los deportes de invierno», remarcaban desde la gerencia a través de las redes sociales. Era la pregunta que hacían decenas de personas, pero que siempre recibían la misma respuesta. Según las explicaciones oficiales, la nieve todavía no tiene el espesor suficiente para poder pisarla y garantizar así la práctica deportiva. En caso de que la nieve no esté bien pisada es cuando aparecen las calvas, que provocan daños en las tablas y los esquís y pueden llevar a accidente.

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