Once fuegos arrasan casi 3.000 hectáreas en la provincia de Ourense

La Voz OURENSE

LOBIOS

Miguel Villar

En el municipio de Cualedro ardieron cuatro viviendas y se quemaron más de 500 hectáreas

14 sep 2020 . Actualizado a las 10:26 h.

Once incendios convirtieron ayer buena parte de la provincia de Ourense en una gran nube de humo. Era un fin de semana en el que las altas temperaturas y el fuerte viento tenían en alerta a los servicios de extinción, que se vieron desbordados por los fuegos, todos ellos intencionados, según denunció anoche el conselleiro de Medio Rural, José González. En las últimas horas ardieron casi 3.000 hectáreas en toda la provincia, pero anoche la situación era muy complicada en Cualedro.

En este municipio ourensano, que ya se vio afectado por el fuego a principios del verano, ardieron ayer cuatro viviendas y se quemaron más de 500 hectáreas. Al cierre de esta edición allí trabajaban decenas de motobombas y varias brigadas, así como los equipos especializados de la Unidad Militar de Emergencias (UME), solicitados por la Xunta a la Delegación del Gobierno ante el elevado riesgo causado por los incendios. El conselleiro dijo que en Cualedro se concentraron todos los esfuerzos por la difícil situación debido a que el viento era muy cambiante.

«Temos todos os medios concentrados para defender ás persoas de Cualedro», señaló González, que insistió en la tesis de la intencionalidad: «Son incendios intencionados, que se fixeron nun momento no que se dicía que vai vir chuvia. Son incendios no sitio no que saben que o vento vai causar moito dano». El conselleiro aseguró: «Imos seguir enriba dos incendiarios. Temos a tecnoloxía e os medios para localizalos e van ter que pagar con penas de prisión e co seu patrimonio. Non se pode permitir isto».

Ya por la tarde, varios integrantes de la Brigada de Refuerzo en Incendios Forestales (BRIF) de Laza habían alertado de la situación cuando se acercaban a los incendios en helicóptero: «Vemos incendios por todos lados. ¡Se ve humo a todo nuestro alrededor! ¡Queman la provincia de Ourense por todos lados! », relataban a las cuatro de la tarde.

La Xunta solicitó la intervención de la Unidad Militar de Emergencias en Lobios, donde preocupaba el incendio en la parroquia de Río Caldo, en pleno parque natural del Xurés. Según la última estimación de Medio Rural, afectaba a 500 hectáreas.

Allí en Lobios, a media tarde, estaban tranquilos pero muy pendientes de la dirección y la fuerza del viento. También de la llegada de la noche. Lo explicaba Diego, un vecino de Vilameá: «O lume de momento aínda está un pouco distante pero a xente está desexando que chegue a UME, que parece que lle dá máis tranquilidade, pero como hai tantos incendios na provincia está complicado. Agora está no corazón do parque». Precisamente, en la zona natural pensaba la alcaldesa de Lobios, Mari Carmen Yáñez, muy abatida. «Está en plena reserva integral y ya llevamos mucho acumulado. Hace dos años en Río Caldo, hace un mes en Manín y ahora otra vez en Río Caldo, lo poco que queda. Es sangrante. Pero también me preocupa Vilameá en función de cómo vaya el viento».

La Xunta también solicitó la declaración de situación 2 (que se activa cuando el fuego se acerca a poblaciones y es necesaria la intervención de medios estatales) en el lugar de Carzoá, en Cualedro, y en Rairiz de Veiga

Lo peor, en Cualedro

El alcalde de Cualedro, Luciano Rivero, pidió a los vecinos que pasasen la noche confinados en sus casas para evitar respirar el humo de los incendios. Los medios de extinción han tenido que multiplicarse porque también ardía Vilar de Barrio, donde se consumieron 450 hectáreas y donde resultaron heridos dos integrantes de la BRIF de Laza, uno de ellos leve pero el otro con quemaduras de segundo grado.

El caso de A Gudiña, con un incendio en un lugar que ha ardido recurrentemente este verano, Pentes, tiene la singularidad de que el humo y las llamas condicionaron la circulación por la A-52 y por la N-525. La Guardia Civil de Tráfico se vio obligada a regular el paso por problemas de visibilidad.