Laza pedirá una indemnización por los vertidos al río Támega

LAZA

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El alcalde invita a otros concellos a sumarse a su demanda

20 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las multas que pueda imponer la Confederación Hidrográfica del Duero a las empresas que trabajan en la construcción de la línea férrea del AVE por los vertidos de lodos en el río Támega ya no son suficientes. Esa es la tesis del alcalde de Laza, José Ramón Barreal Novo, que planteará una demanda de indemnización pecuniaria a alguna de esas compañías por el «grave daño ecológico causado a la fauna fluvial en los últimos años».

El regidor, visiblemente enfadado tras el último enlodamiento que afectó el domingo a varios kilómetros de cauce en Cerdedelo, expuso que: «Tenemos clara la responsabilidad de este último vertido y así lo hemos denunciado ante la Confederación Hidrográfica. El vertido se produjo tras quedarse sin gasoil el motor que bombeaba el agua del túnel Campobecerros-Portocamba. Los propios responsables de la UTE nos confirmaron este hecho». Y añadió: «El agua siguió su curso natural en vez de ser bombeada y desviada y captó todo el lodo de los caminos que puso negro el caudal».

Barreal Novo aseguró: «Si hay una tromba de agua y se traslada lodo al río puede llegar a ser entendible, pero no es admisible que por un descuido, una mala planificación o por el mal mantenimiento de una balsa de residuos, el río se vea contaminado».

Hasta el momento, la Confederación Hidrográfica del Duero impuso ocho sanciones pecuniarias desde 2011 hasta hoy en la cuenca del Támega por vertidos de lodos al cauce, causados por los trabajos de la alta velocidad ferroviaria. Cinco de esas sanciones tuvieron lugar en el municipio de Laza. La mayor de esas multas (en 2015) fue de 10.000 euros, y la menor de 2.000.

Apoyos

«Voy a plantear a otros alcaldes que se estudie una demanda conjunta para pedir indemnizaciones. Las multas de la Confederación es cosa de ese organismo. Casi no hay peces ya en el Támega. El enlodamiento del fondo provoca la mortandad de muchas truchas y otras especies, los huevos quedan enterrados y eso no es admisible», sentenció Barreal Novo.

Esa propuesta fue valorada por el regidor de Castrelo do Val, Vicente Gómez: «Ramón no me comentó nada pero estamos dispuestos a apoyar esa propuesta ya que el enlodamiento al Támega está dañando mucho la vida en el río». En similares términos se expresó el alcalde de Verín, Gerardo Seoane, que expuso que el Concello ya estaba mediando una reclamación, entre otras cuestiones, por los gastos y molestias ocasionados por la no potabilidad del agua de la traída en momentos puntuales a consecuencia del enlodamiento.

El vertido más grave de los últimos años tuvo lugar el pasado 8 de mayo. En pocas horas, el agua del Támega se llenó de altísimos niveles de metales pesados. El ratio de arsénico fue muy elevado y el de hierro fue 1.300 veces el superior al fijado por la actual normativa. Seoane Fidalgo ya informó a la fiscalía de Medio Ambiente de esas analíticas ante posibles indicios de responsabilidad penal en esos vertidos.