La policía se incautó de 270 kilos de marihuana en los dos últimos años

Maite Rodríguez Vázquez
MAITE RODRÍGUEZ OURENSE / LA VOZ

CUALEDRO

POLICIA NACIONAL

Este año se han desmantelado dos plantaciones en interior y el año pasado, cuatro

16 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

La Policía Nacional dio varios golpes en los últimos años a los cultivos en interior o indoor de marihuana. A lo largo del 2017, se intervinieron 200 kilos de esta planta. Hasta finales de octubre de este año, las incautaciones fueron de casi 70 kilos. La Guardia Civil no facilitó los datos solicitados para esta información.

Una de las operaciones más importantes de la Policía Nacional permitió desmontar una nave industrial, en el polígono de San Cibrao, en la que se cultivaban 4.000 plantas. Fue parte de una investigación nacional, denominada Mastín, en la que se desarticularon quince plantaciones en varias provincias. En Ourense fueron detenidos ciudadanos chinos que cuidaban un invernadero interior en el que se incautaron 150 kilos. La segunda actuación en importancia fue en Cualedro, con 32 kilos localizados en una vivienda. En ocasiones, el cultivo en interior va unido al delito de defraudación de fluido eléctrico. Ocurrió en la operación Saínza, con dos arrestos y 85 plantas requisadas.

En el 2018, la mayor incautación fue en la operación Popeye, en la que la Policía se hizo con 40 kilos y practicó una detención. En la operación Samba cayó un sospechoso que tenía una plantación indoor, 1.300 gramos listos para distribuir, según la Policía, y 2.000 euros en efectivo. A otro joven se le incautaron en su casa más de 400 gramos en cogollos. Una mujer fue detenida por tener 8 plantas en su jardín y en Benposta se intervinieron 26 ejemplares, aunque sin arrestos. En la operación Borrasca, se desmanteló un punto de venta en la plaza San Cosme, donde se hallaron, entre otros estupefacientes, 13 gramos de cogollos.

«Todas las drogas producen adicción», dice la coordinadora de Proxecto Home

En Proxecto Home conocen bien los efectos devastadores de la droga sobre la personalidad y la vida de las personas. En Ourense, no tienen casos de consumidores únicos de cannabis, aunque sí tienen un centro ambulatorio para ello en Vigo. En la sede ourensana tratan a politoxicómanos, de los cuales «el 85 % ha tenido experimentación con cannabis», dice la coordinadora del centro, la psicóloga Ofelia Debén Rodríguez.

Las personas que acuden al centro ourensano no tienen el cannabis como droga principal ni única. La psicóloga expone que, sin embargo, es una sustancia que sirve «como trampolín para otras drogas». Considera Debén que «no hay mucha diferencia en la problemática social e individual en un adicto al cannabis o a la cocaína». «Hay una desestructuración fuerte de la personalidad, desorientación, desconcentración, desmemoria», indica la psicóloga.

Prevención

El problema se agrava si el inicio con la droga es temprano, en la adolescencia, con la personalidad aún poco formada, apunta. En esas edades, la incidencia del cannabis es más grave a nivel cognitivo. Para Ofelia Debén, «no hay drogas blandas o duras, cada una tiene sus afectaciones en el sistema nervioso. El tratamiento es similar: identificar las razones por las que esa persona ha entrado en esa adicción. Cuando se está experimentando con una droga, como es al principio con consumos esporádicos recreativos, ya hay una incidencia en el sistema nervioso. Todas las drogas producen adicción, por eso para nosotros es preocupante el consumo poco habitual», recalca la coordinadora.

Por todo ello, la psicóloga del centro ourensano de Proxecto Home considera necesario que existan «buenos programas de prevención».