El colegiado recogió en el acta que el futbolista del Cenlle le dio un cabezazo después de enseñarle la segunda cartulina amarilla
10 may 2023 . Actualizado a las 19:39 h.Corría el minuto 89 en el campo de Albán, en Coles, donde el equipo local se enfrentaba al Cenlle. El marcador ya indicaba una clara victoria a favor de los locatarios por 4-0. Sin embargo, el partido terminó de la peor forma posible, con algo que parece ya de otra época: una agresión de un jugador al árbitro, con el agravante de que el deportista que dirigía el encuentro es todavía menor de edad.
Hugo Alcaraz González, el colegiado designado para pitar este choque de la jornada 29 de Segunda Galicia, tiene 17 años y esta es su segunda temporada como árbitro de la delegación ourensana. En ese minuto 89 del partido, amonestó con tarjeta amarilla al jugador del Cenlle Maikel del Cabo, por pisar a un oponente del Coles. Era su segunda cartulina y significaba la expulsión. Antes de irse del campo, el futbolista se dirigió al árbitro, le acarició la cara en un gesto de burla, a lo que el joven colegiado replicó que no le tocara. A continuación, el jugador propinó un cabezazo al trencilla y cayó al suelo, según recogió este en su acta al final del encuentro. El Cenlle se mostró en desacuerdo con esta versión y así se lo hizo saber a la delegación ourensana, sin ofrecer disculpas por lo ocurrido.
El partido continuó, a pesar de que lo habitual en estos casos es que se suspenda. No lo acordó así al joven árbitro, quizás por su falta de experiencia y porque faltaba solo un minuto de tiempo reglamentario, explican en el comité ourensano.Sin embargo, tras terminar de redactar el acta, en la que describía la agresión que sufrió, acudió a un centro médico, ya que se sentía mareado y con dolor de cabeza. «Aún hoy (miércoles) tiene la marca del cabezazo en su frente», asegura el delegado del colegio de árbitros en Ourense, Claudio Cerdeira.
Esta es la primera agresión a un árbitro esta temporada en la provincia, aunque hace unos meses hubo otra en el campo del Maside en la que quien pegó fue un colegiado, concretamente un asistente de banda golpeó a un aficionado que le había estado increpando todo el partido. «Desgraciadamente, no podemos terminar una temporada con cero agresiones, que es el objetivo», lamenta Cerdeira. «Esto está fuera de tiempo», advierte el delegado ourensano de fútbol, Raúl Rois.
Este miércoles deben publicarse las sanciones para los amonestados en la pasada jornada y tras ello, el árbitro presentará denuncia por lo sucedido, afirmó el responsable del colegio. Así lo recomienda el protocolo del comité. A pesar de lo ocurrido, el joven tiene intención de seguir arbitrando, cree Cerdeira.
Finalmente, el Comité de Competición y Disciplina ha sancionado con 15 meses de inhabilitación (60 partidos) al jugador Mikael del Cabo por «agredir al árbitro principal, siendo factores determinantes la minoría de edad del colegiado del encuentro así como la necesidad de asistencia médica al término del encuentro, aportando el colegiado parte de lesiones y atención hospitalaria en urgencias».