Hany Kauam, cantautor venezolano: «Escribí mi primera canción a los ocho años porque me enamoré de mi maestra»

CELANOVA
El compositor acaba de lanzar un nuevo tema, titulado «Contigo», a ritmo de bachata y sigue componiendo desde Celanova, un lugar que le inspira
27 may 2023 . Actualizado a las 20:44 h.Hany Kauam es un cantautor y compositor venezolano que reparte su tiempo artístico entre Venezuela y Celanova, donde reside por temporadas. Kauam, que tuvo una etapa de éxito y popularidad en su país cantando sus canciones y escribiendo para otros artistas, está buscando un sitio en el panorama musical gallego y ya ha cerrado algunas actuaciones en Celanova, Barbadás y Muíños.
La historia con la música de Hany Kauam comenzó de niño: «Escribí mi primera canción a los ocho años porque me enamoré de mi maestra». En los recreos la cantaba y le aplaudían. Cuenta que fue entonces cuando decidió claramente que quería dedicarse a escribir canciones. «Con 13 o 14 años comencé a abrir conciertos de famosos de mi país, con un grupo que llamé Intriga», rememora.
Con 15 años dejó su Ciudad Bolívar para probar suerte en la capital, Caracas. «Dormía bajo los sellos disqueros, esperando que alguien me escuchase. Así pasaron muchos años. Di clase de guitarra, fui extra de televisión en telenovelas y empecé a conocer gente», relata. En los descansos de aquellas grabaciones aprovechaba para cantar y empezaron a pedirle temas. Entró en un programa de telerrealidad que le hizo famoso en Venezuela. «Muchos de los que me veían cantando en el metro o en el bus, para ganarme la vida, me vieron en televisión y me decían: 'te lo dije, que ibas a llegar’». Grabó un primer disco, que fue un «bombazo» en su país.
«Han pasado muchos años y sigo haciendo lo mismo. Escribir canciones y gritarlas en cada concierto que me llaman. Estar en un escenario es el vicio más grande que tengo», enfatiza. Es tu amor o La mujer perfecta fueron algunos de sus éxitos. Su último lanzamiento, Contigo, ya se puede escuchar en las plataformas.
Llegó a Celanova por lazos familiares y le inspiraron el paisaje y el ambiente de la tierra de los poetas. «Ando por el monte, con la guitarra y con mi teléfono, componiendo y grabando muchísimo. La gente me ha tratado como uno más, me he sentido como en casa. Es un sitio que me da mucha buena vibra», agradece.