Concellos de Monterrei, O Ribeiro, Celanova y A Limia han recibido ayudas para proyectos similares
11 oct 2019 . Actualizado a las 13:59 h.Medio centenar de ayuntamientos, los que tienen delegada la recogida de basura en la Diputación ourensana, se verán beneficiados por un proyecto de la institución provincial para poner en marcha un punto limpio a domicilio. El Perfil del Contratante de la Diputación ha publicado la licitación del suministro de dos vehículos para realizar ese trabajo.
El Diario Oficial de Galicia publicó en diciembre del año pasado las bases reguladoras de la concesión de ayudas para financiar actuaciones en materia de residuos con cargo al programa operativo Feder Galicia 2014-2020. En enero de este año, la Diputación presentó su candidatura con un proyecto que prevé la creación de un punto limpio a domicilio que dará servicio a 51 concellos de la provincia. Finalmente, en julio se comunicó a la institución provincial la concesión de la ayuda, que asciende a 40.000 euros.
Esa línea de subvenciones también ha beneficiado a la mancomunidad de O Ribeiro (60.000 euros), a la de Terra de Celanova (37.269,70 euros), a la agrupación de Monterrei y Cualedro (14.024,40 euros) y a los ayuntamientos de Carballeda de Avia (40.000 euros), Vilardevós (13.790,32 euros), Vilar de Santos (8.507,75 euros) y A Mezquita (6.959,92 euros). Ese dinero servirá para implantar servicios de puntos limpios móviles que evitarán a los ciudadanos tener que desplazarse hasta ese tipo de instalaciones cuando tienen residuos que no se pueden depositar en los contenedores de recogida general.
En la capital provincial ya funciona un sistema similar
En el caso de la Diputación ourensana, el proyecto tiene un coste total de 80.000 euros (la institución provincial aporta el 50 %). Con ese dinero se comprarán dos vehículos tipo furgón para prestar el servicio en los 51 municipios que tienen delegada la recogida de basura. Este sistema ya funciona en el Concello de Ourense. Los vecinos de la capital disponen de un punto limpio móvil que se sitúa cada día de la semana en un lugar distinto de la ciudad. Con medidas como esta se trata de ofrecer las máximas facilidades posibles para evitar que los residuos acaben depositados en contenedores que no les corresponden o incluso en vertederos incontrolados.