«El Náutico de Castrelo le debía gratitud a quien nos ha ayudado»

Luis Manuel Rodríguez González
luis m. rodríguez OURENSE / LA VOZ

CASTRELO DE MIÑO

Santi M. Amil

Beatriz Alberte distinguirá a los seis primeros socios de honor de la entidad

12 jun 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

El Club Náutico de Castrelo de Miño ha convocado para esta tarde a sus compromisarios y colaboradores para un acto de reconocimiento a los que serán sus seis primeros socios de honor, distinguidos por su incidencia en la trayectoria de una entidad que ya superó hace un tiempo el cuarto de siglo de historia.

La cita está prevista en el Hotel Balneario de Laias Caldaria, para las 20.00 horas de hoy y la presidenta del club, Beatriz Alberte, tiene claro que era necesario llamar la atención y recordar la labor realizada por esas seis personas: «Lo planteamos en nuestra junta directiva y no hubo dura de la incidencia que han tenido en el club José Luis Baltar, José Feijoo, José Luis Méndez, Francisco Quiroga, José Luis Suárez y Anna Yuchenko. La verdad es que el Náutico de Castrelo le debía gratitud a estas personas que nos han ayudado. En principio queríamos hacerlo coincidiendo con las bodas de plata, pero el momento no era propicio y después estaba pendiente el final de mi mandato y por eso decidimos esperar hasta ahora».

La propia Alberte Castiñeiras desgrana, uno a uno, el calado de los protagonistas de la velada de hoy y los méritos contraídos para que su nombre salta a la palestra: «Se trata de personas de una gran calidad humana y que han sido importantes en el desarrollo del club, comenzando por José Feijoo Villanueva, alcalde de Castrelo de Miño en el momento de la fundación del club, como recoge el acta firmada en 1990 junto a Antonio Nieves, José Luis Martínez, Antonio Villar y Benito Pinal». La presidenta subrayaba también, que bajo el mandato del alcalde, el club se asentó con una importante actividad en el mundo de la vela, además de la colocación de la primera piedra del edificio principal o la ampliación de la casita original.

En cuanto a Francisco Quiroga, Beatriz esgrime que «su posición al frente de la Federación Galega de Vela y vicepresidente de la Española también fue crucial en el crecimiento del Náutico, comenzando por las concentraciones de la Escuelas de Vela». Aquella idea del directivo tiene aún continuidad hoy en día, cuando se prepara la vigesimoprimera edición. Fue además el impulsor del albergue y del Descenso de Remo de O Ribeiro, a imagen y semejanza de las grandes pruebas inglesas.

Alberte tampoco olvida la incidencia de Méndez, destacado asesor de las actividades de remo en Castrelo de Miño y figura clave en la incorporación al club de otra de las distinguidas, Anna Yuchenko, una olímpica rusa que «por las cosas del amor se afincó en O Ribeiro y a la que ayudamos a que siguiera entrenándose aquí, con una nueva embarcación; en España se proclamó campeona nacional en ocho ocasiones y también trabajó en la formación de los niños del club».

De José Luis Suárez, el presidente de Copasa, la presidenta del Náutico resalta que «colaboró mientras pudo con muchas de las actividades del club, sobre todo con los descensos internacionales, porque llegó a gestionar el vuelo de la selección búlgara y a dotar a los participantes de alojamiento en varias ediciones». Explica que su apoyo moral y material fue notable, como el de José Luis Baltar: «Su figura quizás sea controvertida para algunos, pero siempre escuchó nuestros proyectos y estuvo al tanto del modo en que podía ayudarnos. Como los demás, han contribuido a que mi generación y la de mis hijos disfrutaran del Náutico, algo que no está garantizado para el futuro».