La pizarra avala con un estudio su carácter sostenible frente a otros productos

El Clúster de la Pizarra ha renovado la Declaración Ambiental de Producto (DAP) para su producción. Se trata de una certificación que aglutina a empresas fabricantes de productos y materiales que tienen un compromiso con la sostenibilidad y medio ambiente, y desean avanzar en los impactos medioambientales de sus productos.

Para poder renovar la DAP, los consultores analizaron los datos de 25 empresas integradas en el clúster y de otras de Castilla y León, referidos a durabilidad y sostenibilidad ambiental, emisiones, consumo de energía y agua o eliminación de residuos, entre otros. «Los técnicos y profesionales del sector de la construcción podrán seleccionar los tipos de pizarra según criterios medioambientales, más allá de los estéticos, económicos y funcionales», defendió Víctor Cobo, el presidente del clúster. Apeló al estudio hecho sobre el ciclo de vida de la pizarra (titulado De la cuna a la tumba) para asegurar que «podemos concluir que la pizarra natural es más sostenible que otros productos sustitutivos utilizados en la construcción de cubiertas tales como el zinc, la teja o el fibrocemento».

La renovación de la DAP estará vigente hasta el año 2026. Es un sello que se aplica en toda Europa, fundamental en el caso de la pizarra teniendo en cuenta que más del 95 % de la producción se exporta, siendo Reino Unido y Francia los principales mercados.

En la presentación sobre la renovación del certificado, Cobo estuvo acompañado del delegado de la Xunta, Gabriel Alén, que destacó las bondades ecológicas de la pizarra; la alcaldesa de Carballeda de Valdeorras, María del Carmen González, que incidió en el papel fundamental que el sector tiene para el desarrollo económico de la comarca y de la provincia; la subdirectora de Recursos Minerales de la Xunta de Galicia, María Coutinho, y los técnicos Eduardo García y María Concepción Lago.

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