El pequeño quedó a cuatro metros de profundidad y no resultó herido
16 abr 2022 . Actualizado a las 16:02 h.Un niño de nueve años tuvo que ser rescatado tras caerse al pozo de su casa en la aldea de Bentraces, en el concello ourensano de Barbadás. Ocurrió este viernes por la mañana, cuando el pequeño se encontraba jugando en la parte trasera de la casa de su familia. El menor es del País Vasco y está pasando las vacaciones de Semana Santa junto a sus parientes ourensanos. La instalación estaba cubierta con una tapa de fibra de cemento, ya bastante deteriorada, que cedió cuando el niño saltó sobre ella desde un altillo, situado en el lateral de la escalera trasera de acceso a la casa. Afortunadamente el pozo estaba lleno de agua, lo que amortiguó la caída del pequeño. A pesar de que apuntan a que el foso tiene unos once metros de profundidad, el niño cayó al agua y consiguió agarrarse a una tubería que sube por el lateral del pozo, quedando sujeto a una distancia de cuatro metros del fondo.
Varios familiares y algunos vecinos de la casa, situada en la carretera general de entrada a Bentraces, avisaron a los servicios de emergencias. Hasta allí se trasladó el equipo de Protección Civil de Barbadás, que fueron los encargados de socorrer al pequeño, que colaboró en todo momento con ellos. Los rescatadores consiguieron subir al pequeño gracias a un sistema de cuerdas.
Una ambulancia medicalizada acudió al lugar de los hechos. Los sanitarios realizaron un reconocimiento al pequeño que, por fortuna, no sufrió ningún daño físico, aunque sí que estaba muy nervioso y con un gran susto por lo ocurrido.