Este restaurante de Barbadás sabe a comida de toda la vida

María Doallo Freire
María Doallo OURENSE

BARBADÁS

Alberto y Lisa, posando con uno de sus platos estrella el pulpo con queso de Arzúa
Alberto y Lisa, posando con uno de sus platos estrella el pulpo con queso de Arzúa Santi M. Amil

O Muiñeiro lleva catorce años elaborando platos tradicionales con un toque moderno en A Valenzá

31 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Alberto Sequeiros y Lisa Fernández son un matrimonio gastronómico. Los dos llevan toda la vida trabajando en hostelería y son expertos en la cocina. En el 2008 decidieron tomar las riendas y apostar por un proyecto en el que llevar a cabo su propia idea de negocio. Así dieron vida al restaurante O Muiñeiro, en Barbadás. «Llevo trabajando en este sector desde 1987», cuenta Alberto. Él empezó haciéndose cargo de la sala y Lisa de la cocina, aunque ahora están los dos juntos en los fogones. Y esa comida es el punto fuerte de O Muiñeiro. Sus platos estrella son el pulpo á feira con queso de Arzúa y también el chuletón de vaca a la piedra. «Nos gusta que nuestra comida sepa a los ingredientes que lleva cada elaboración por eso huimos de las salsas y los marinados», explica Alberto. «Hacemos cocina tradicional, la de toda la vida, pero intentamos darle un toque diferente», confiesa.

Entre sus propuestas está una cazuela de merluza que es la favorita de muchos. También hacen bacalao gratinado con espinacas y langostinos. Y entre la carne, que es una de las especialidades de O Muiñeiro, los comensales suelen pedir también el lomo de vacuno mayor a la piedra. Para compartir, de entrantes, destacan sus setas a la crema, revueltos variados y los chipirones a la plancha. «Creo que lo que más se nota es que la materia prima es 100 % gallega y eso le tira mucho a la gente. Nos piden muchísimo las zamburiñas a la plancha, por ejemplo», comenta el hostelero. De este restaurante destaca a la par que su comida, su espacio privilegiado en A Valenzá. Tiene dos grandes terrazas, en las que es posible degustar sus platos al aire libre, y un salón principal. «Vienen muchas familias y grupos de amigos, nos visitan desde O Carballiño, de Celanova... Nos sentimos muy orgulloso de la respuesta de la gente y eso es lo que más feliz nos hace», termina.