Bande se convierte en plató de cine

María Doallo Freire
María Doallo OURENSE

BANDE

El equipo del corto estará rodando en las termas de Bande hasta el domingo
El equipo del corto estará rodando en las termas de Bande hasta el domingo Santi M. Amil

El corto «Que mi voz suba a los montes» se rueda en las termas romanas de la localidad ourensana hasta el domingo

28 ene 2022 . Actualizado a las 15:10 h.

Que mi voz suba a los montes, así, como el poema de Miguel Hernández, es el título de un cortometraje que se sitúa entre el pasado y el presente. «Es una historia humana. De cómo los jóvenes de hoy en día tienen preocupaciones similares a las que tenían hace años los soldados romanos. Empieza en hoy y va para atrás, hasta aquella época», explica Carlos Pardo. Él es el productor de este proyecto que dirige el cineasta Gabriel Azorín y que es la antesala de la que será su nueva película, Anoche conquisté Tebas. El escenario de ambos filmes no es otro que las termas de Bande. Este rincón ourensano ya conquistó el mundo audiovisual, cautivando a miles de espectadores, con su participación en la serie de Carlos Montero para Netflix, El desorden que dejas. Pero las caldas romanas siguen encandilando a cineastas, que las ven como un plató perfecto. «Cuando Gabriel visitó este lugar por primera vez tuvo una experiencia casi mística, le hizo pensar mucho. En el cine existen determinadas búsquedas que están siempre intrínsecas en la cabeza de los creadores, una de ellas es el afán por conseguir una imagen en la que se revelen diferentes épocas. Eso ocurre en Bande. Donde estás justo ahora, estuvo hace cientos de años un soldado romano. La historia ha pasado por encima del lugar», explica Carlos. Desde este jueves y hasta el domingo, las pozas serán las protagonistas del rodaje de este cortometraje, cuyos actores principales son siete adolescentes gallegos. «Son de Lobios, Celanova, Allariz y Ourense. Fue un proceso de selección largo, en distintos institutos de la provincia, pero al final dimos con lo que estábamos buscando», admite el productor. No estarán solos, los acompañarán en las distintas escenas otros ourensanos de la zona. Hasta 60 personas están involucradas en la parte interpretativa del corto como figurantes. Más todo el equipo técnico. Un despliegue de película para conseguir que el corto sea perfecto. «El escenario ya lo es», termina Carlos.