Un pleito entre un ex senador y un juez fallecido se mantiene a los 25 años del enfrentamiento

ourense / la voz

AMOEIRO

Agustín Vega ha visto crecer a 164.000 euros una deuda de 48.000, al sortear la sentencia de 1993, firme en 1994

09 abr 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Veinticinco años después del origen del conflicto y veintidós años después de la firmeza de una sentencia, en la que se fijaba la cantidad de 48.000 euros (en realidad, ocho millones de las antiguas pesetas), que el entonces parlamentario gallego del PSOE Agustín Vega Fuente debía abonar al fallecido juez Olegario Somoza por atentar contra su honor, el asunto sigue abierto.

La ejecución de la sentencia debería haber quedado cerrada ayer, con la toma de posesión de una casa y una finca embargada al ex político para hacer frente a una deuda que nunca atendió, pero no ha sido así. El abogado de los herederos del juez, Antonio Feijoo, cree que el ex senador, ex parlamentario, ex diputado provincial y ex concejal de Ourense y de Amoeiro, Agustín Vega, ha puesto el enésimo obstáculo para evitar cumplir la sentencia.

Entregó Vega una parte de la casa que posee en Costa do Monte, en Amoeiro. Se desprendió de un anexo, pero no de la construcción principal con su finca, que es lo que correspondía, según el demandante, que se remite al informe pericial para subastar bienes de Agustín Vega con el fin de hacer frente a la deuda legal.

Tiene esta situación su origen en el año 1991. El entonces senador había hecho unas declaraciones en las que hacía referencia a que el juez dictaba sentencias tras haber bebido. La demanda civil del juez dio lugar a que en 1993 fuera condenado el ex político. La sentencia fue confirmada un año después por la Audiencia. Y en 1999, al no haber pagado Agustín Vega los ocho millones de pesetas impuestos por intromisión en el derecho al honor del juez, se instó la ejecución.

Sin propiedades

Nada tenía a su nombre, sino al de la sociedad Ciagavia S.L. constituida por él y sus dos hijas, por lo que el primer intento de embargo se estrelló. Un pleito civil llevó a la anulación de la constitución de la sociedad y la aportación de bienes. Se tasó entonces su propiedad en 264.000 euros. La primera subasta, en el año 2008, se aplazó al presentar una hermana de Vega una demanda para levantar el embargo. Decía que aquello se lo había dado ella a sus sobrinas. El juzgado desestimó la tercería planteada por la hermana de Agustín y se abrió una segunda subasta en 2014. Entonces se declaró en situación de concurso (antes suspensión de pagos) el propio Vega Fuente. La jueza no se lo admitió.

Para la tercera subasta, como cargas sobre el inmueble, aportó el ex político que estaba arrendado a la sociedad Artesanos de la Agricultura y Artesanía de Galicia, constituida por él y sus hijas. El Registro de la Propiedad canceló el arrendamiento.

La deuda, mientras, siguió creciendo entre intereses y costas hasta llegar a 164.000 euros, una cantidad que supera la cifra que permite la adjudicación aun cuando la deuda sea menor.

En diciembre, instaron los herederos de Somoza Castro la ejecución, es decir, que se les adjudique la propiedad para compensar la deuda. El día señalado para la entrega fue ayer. Y resultó que lo que en el Registro es una única pieza aparece en el catastro dividido en dos. Agustín Vega sostiene que la entrega solo afecta a la parte de menos valor, que la otra no está afectada y que, además, está ocupada. Es de la cooperativa Artesanos de la Alimentación. Otro obstáculo.

El siguiente paso, como ya ha pedido el abogado de los demandantes, será identificar a quienes ocupan el edificio para conminarlos a que lo abandonen.

Los demandantes siguen reclamando porque creen que solo se les entregó parte de la casa