Eslóganes que venden lugares

m. rodríguez OURENSE

ALLARIZ

Los ayuntamientos se apuntaron al márketing turístico creando lemas que definiesen su esencia para el visitante

16 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Las administraciones locales juegan un papel importante en la promoción turística de sus recursos. Desde que hace veinte años se expandiera el término del turismo rural, cada municipio -en solitario o asociado con los de su comarca- ha ido creando eslóganes turísticos que sintetizaran lo mejor que tiene para ofrecer al visitante. Lemas que se usaron puntualmente o que siguen siendo una referencia en las publicaciones, folletos, webs o cartelería que realizan los propios concellos y que también asumen como propios los establecimientos turísticos o comerciales como identificador o marca de cada lugar.

En Allariz, el Concello ha ido realizando diferentes eslóganes turísticos en función del producto que deseaban dar a conocer. «Allariz, o teu mellor destino», como eslogan turístico genérico aún se utiliza en la web del Concello y también fue el lema elegido para una campaña publicitaria en flotas de camiones, recuerda la concejala de promoción económica Cristina Cid. «Allariz sabe» fue el elegido para promocionar los recursos gastronómicos del municipio y el que cobija eventos como las Xornadas de Carne de Boi de estos días. Pero, como señala la responsable del departamento municipal: «Allariz é a marca, os demais son apelidos que usamos porque creo que funcionan, pero o potente é a marca Allariz en si, aínda que serven para diferenciar os produtos que estás ofrecendo».

Lo decía el publicista Luis Bassat en su obra El libro rojo de las marcas, que quería que fuese «un elemento de reflexión para otro tipo de profesionales, por ejemplo, alcaldes de ciudades y villas porque ¿el nombre de una ciudad o villa no es también una marca».

Así, los eslóganes no se han quedado como algo estático. En Celanova, ya hace más de dos décadas que comenzaron a emplear como definición de su producto turístico «Celanova, pedra e poesía». Antonio Piñeiro, técnico de cultura del Concello, expone cómo se creó: «En dúas palabras queda definido o patrimonio cultural e histórico de Celanova. O que se persigue como lema é un impacto único, que lle dá personalidade ao lugar e por iso se mantén». La piedra de Castromao, del monasterio o de la plaza Mayor se unía a la tradición literaria, poética, como imagen de la villa. El eslogan se sigue colocando en ocasiones, pero el Concello y promotores locales que han surgido en los últimos años también van introduciendo otros nuevos asociados a la figura de san Rosendo y que agrupan a concellos vecinos.

El Concello de Bande apostó en su día por un lema «Pousada do espíritu», que se remonta al año 2007 y que todavía luce a la entrada del municipio. «Foi por un tema puntual dun plan director de promoción do patrimonio e dos recursos naturais e non se usou moito máis», explica el alcalde, José Antonio Armada. El Concello usa más para sus publicaciones y trípticos un anagrama con la palabra Bande y una silueta de la iglesia de Santa Comba como imagen corporativa que unifica las acciones culturales o turísticas.

Verín está apostando fuertemente por el eslogan «Verín, Cidade de Auga». Lo usan en folletos, webs y soportes que envían a ferias desde hace años, pero el actual gobierno bipartito lo utiliza más en los últimos tiempos para vincular la riqueza termal del municipio con la imagen del municipio. «Laza, cultura e tradición dun pobo» es el elegido por el Concello para remarcar el atractivo turístico de las tradiciones locales, singularmente el de su carnaval, uno de los más antiguos y con más historia de toda Galicia. Al igual que en Verín es usado en folletos turísticos genéricos sobre el municipio, informa Sindo Martínez.

Algunas frases que hoy serían promocionales surgieron del uso popular, como el conocido «para carne, pan e viño, O Carballiño», al que luego se añadió el pulpo como emblema gastronómico y festivo de la villa. En Valdeorras apostaron por «Vilamartín, de España jardín» o «O Barco, vila da cordialidade», apunta María Cobas.