La cita con la Virgen Dolorosa marca el final del ciclo estival

A POBRA DE TRIVES

Los grupos Gran Casino y Compostela marcarán el ritmo este fin de semana

15 sep 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La localidad de Pobra de Trives respira hoy tranquilidad después de los dos días de fiesta en honor al Cristo de la Misericordia. Pero este parón de la programación lúdica es tan solo momentáneo porque esta localidad ourensana tiene todavía un compromiso que cumplir dentro de su ciclo de celebraciones de la temporada veraniega: la celebración en honor a la Virgen Dolorosa.

El programa preparado para ese festejo se reparte entre el sábado y el domingo. El día 17, al filo de las 11.00 horas, la charanga Terras do Bibei, calentará el ambiente con el pasacalles matinal. Esta formación local, que en la actualidad cuenta con once integrantes, se ha marcado como objetivo recuperar piezas antiguas y tradicionales de las fiestas populares. Su repertorio es de lo más variado y va desde pasodobles al merengue, pasando por boleros, rumbas o tangos.

A partir de las 21.000 horas arranca la primera sesión bailable, que estará amenizada por la orquesta Gran Casino. El grupo, que también se encargará de la verbena, cuenta con trece integrantes y acercará a las tierras trivesas su último espectáculo con el que han cosechado el aplauso del público durante toda esta campaña veraniega.

El domingo será el día grande y arrancará a las 10.30 de la mañana con el pasacalles de la Banda de Música de Ramirás. A las 12.30 horas está fijada la misa solemne que culminará con la procesión de la imagen de la Virgen por las principales calles de la localidad. A las 19.00 horas de nuevo tomará las riendas la Banda de Música de Ramirás, que ofrecerá un concierto en la praza do Pilón. El testigo lo tomará la orquesta Compostela, que se encargará de la última sesión bailable, a partir de las 21.00 horas.

La Banda de Ramirás acompañará la procesión y ofrecerá por la tarde un concierto en la praza do Pilón.

Una excusa para disfrutar de su naturaleza

Las fiestas pueden ser una excusa excelente para animarse a conocer en profundidad todos los encantos que esconde el municipio trivés. Son muchos y variados, y van más allá del atractivo nevado invernal. Restos de castros, el paso de la Vía Nova romana y su emblemático puente del Bibei, son solo algunos vestigios que hablan de su longeva historia, pero también pueden encontrar iglesias y puentes medievales, visitar el Mosteiro de San Salvador en la localidad de Sobrado, con su torreón separado del cuerpo del templo, los pazos y casas blasonadas; entre ellas la Casa Grande o Pazo do Marqués, dentro de la propia villa de Trives. La gastronomía es otro de sus atractivos -con la bica mantecada como estrella-, pero sobre todo Trives es naturaleza en estado puro y hay rutas y actividades que ayudan a descubrirla.

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