Los sanitarios de primaria se forman para atender emergencias

María Cobas Vázquez
maría cobas OURENSE / LA VOZ

A GUDIÑA

CEDIDA

El 35 % de los trabajadores de la provincia recibirán este mes nociones específicas

17 abr 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras sufrir una parada cardiorrespiratoria, cada minuto de retraso en la desfibrilación reduce entre un 7 y un 10% las posibilidades de supervivencia del paciente. No cuesta demasiado echar la cuenta para saber que en esa situación, la primera atención, la más cercana, es fundamental. Y salvo que uno esté próximo a un hospital, lo más probable es que le atiendan los sanitarios de su centro de salud. Médicos y enfermeros que están formados, pero a los que a veces les falta práctica en estas lides. «Los profesionales están muy bien formados en teoría, pero hay que incidir un poco más en la simulación y en la coordinación, para llegar a la excelencia», argumenta María Concepción Alonso, directora de procesos con ingreso del CHUO y coordinadora del programa Redcasa (Rede de capacitación sanitaria), que busca formar a todos los profesionales sanitarios en atención a las emergencias.

En este primer semestre del año, la formación llegará a cerca del 35 % de los trabajadores de los centros de salud, empezando por los más alejados de los hospitales. Así, ya ha participado en las sesiones el personal médico y de enfermería de O Carballiño, Bande y Celanova. Hoy le toca a los de A Gudiña y Viana do Bolo; mientras que en próximos días será el turno de los de Castro Caldelas, A Rúa de Valdeorras y Rubiá. «El objetivo es llegar al 100 % del personal del Sergas», avanza Alonso. Los instructores del curso son fundamentalmente médicos y enfermeros del grupo de Reanimación Cardio Pulmonar del CHUO, pero también hay personal de los hospitales comarcales. «De cara a mantener la formación en el tiempo, nos interesaba que en O Barco y Verín también tuviesen sus propios instructores», apunta Alonso. Todos han recibido los mismos cursos. «Queremos que el 100 % de los profesionales reciban la firma formación, por eso era importante que los instructores se formaran con el mismo material y los mismos casos», ahonda la coordinadora de Redcasa.

En las sesiones utilizan maniquíes de simulación avanzada, «que permiten seleccionar distintas situacións clínicas, coma dor torácico, palpitacións... para que as habilidades e destrezas, adquiridas durante o adestramento, sexan aplicables ao máximo á vida real», explican desde el Sergas. Estos pacientes virtuales permiten la intubación por boca o nariz y la inserción de dispositivos. Cuentan con pulmones diferenciados, así como variabilidad de ritmos cardíacos. «En total, máis de 1.400 combinacións, que reproducen estados e signos clínicos reais, posibilitando a súa monitorización cardíaca, a desfibrilación con descargas reais, a valoración do estado das pupilas, a canalización ou perfusión de fluídos nas vías venosas do brazo, a medición do pulso e a emisión de frases ou sons», especifican desde el Sergas, que organiza el programa Redcasa a través de la Axencia de Coñecemento en Saúde.

El objetivo es bajar esas estadísticas que señalan que la mayoría de las muertes evitables se deben a enfermedades coronarias y ocurren fuera de los hospitales, estimándose que la parada cardíaca súbita es la responsable de más del 60 % de las muertes de adultos por enfermedad cardíaca. Muchas veces la primera atención recae en los profesionales de los centros de salud, que deben mantener la cadena de supervivencia hasta que el paciente pueda ser atendido en una unidad especializada. De ahí la importancia de que reconozcan de manera precoz el riesgo de parada cardiorrespiratoria, la reanimación cardiopulmonar y la agilidad en el aviso a los servicios de emergencia.

«Es una simulación para que en el momento de la realidad no falle nada»

Todavía están en la fase inicial, pero la coordinadora del programa Redcasa asegura que los primeros datos hablan en positivo de la actividad formativa. Los alumnos valoran de manera especial poder formarse en el medio real en el que trabajan, con el equipo que tienen y con los compañeros con los que están a diario. «No son ellos los que se tienen que desplazar a que les cuenten, sino que ponen en práctica la teoría con los medios reales que tienen. No es un ?habría que tener?, sino un ?tengo esto, y con esto hago la simulación?. Es una puesta en práctica de todo para que en el momento en que la situación ocurra en realidad, no falle nada», explica María Concepción Alonso. Asegura la directora de procesos con ingreso del CHUO que es una «necesidad que veníamos repetida», y que está siendo «muy aceptada».

Además, avanza que este será el primer programa de esta línea, cuyos resultados serán analizados en cuando remate esta primera fase. «Vamos a ver no solo la satisfacción de la gente que recibe la formación, sino que vamos a medir su repercusión a nivel de los pacientes», explica. En esta primera fase el objetivo es llegar a cerca del 35 % del personal sanitario de los centros de salud, para, en sucesivas ediciones, ofrecerlo a la totalidad de profesionales tanto hospitalarios como de otros dispositivos asistenciales; con la meta de establecerlo como una acción formativa continuada.

La formación en emergencias para los sanitarios de los centros de salud es obligatoria, y por eso se desarrolla dentro del horario laboral.