Ourense registró más de 200 manifestaciones a lo largo del 2017

Maite Rodríguez Vázquez
Maite rodríguez OURENSE / LA VOZ

A GUDIÑA

MIGUEL VILLAR

Las protestas laborales motivaron buena parte de las movilizaciones en la provincia

28 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Los ourensanos siguen ejerciendo el derecho de manifestación, pero con menos presencia en la calle que en los duros años de la crisis económica. En este 2017, según datos proporcionados a mediados de diciembre por la Subdelegación del Gobierno, fueron 205 las concentraciones o movilizaciones que se llevaron a cabo en la provincia. El año comenzó con numerosas protestas de los trabajadores de la empresa Onet Seralia, concesionaria de los servicios de limpieza en edificios municipales del Concello de Ourense para reivindicar garantías en su puesto de trabajo. Todas las concentraciones de estas trabajadoras fueron comunicadas -requisito administrativo que se exige para las convocatorias- pero en 29 de las movilizaciones de este año no ocurrió así y no se anunciaron previamente a la Subdelegación. Sucedió por ejemplo en concentraciones celebradas ante el centro de salud de Viana do Bolo, para reclamar «un servicio de pediatría de calidad» o la convocada ante la Universidad Laboral para exigir justicia para la asesinada Socorro Pérez, que trabajó en aquellas instalaciones.

Las motivaciones sociales y políticas fueron asuntos que provocaron varios ejemplos de manifestaciones. Hubo protestas con marchas por la capital o en la plaza del Concello de O Barco de Valdeorras para mostrar el rechazo a la ley de educación Lomce o para protestar por el encarecimiento de la vida.

Hay algunas convocatorias marcadas por el calendario, como las celebradas para conmemorar fechas como el día internacional de la mujer, las del Primero de Mayo o las del 25-N para la erradicación de la violencia de género, y otras que vinieron dadas por la climatología, como las marchas y concentraciones que llevaron a cabo agricultores y ganaderos para exigir medidas a las administraciones para compensar los daños que las heladas causaron en los cultivos.

En el mes de mayo se celebró una gran manifestación en la capital, pero también hubo otras sectoriales o comarcales en lugares como Ribadavia, Viana do Bolo, A Gudiña o Beade, que incidieron en la afectación del sector vitivinícola o ganadero.

Otras movilizaciones tienen carácter periódico y mantenido en el tiempo, como las de los emigrantes retornados descontentos con la política fiscal que se les aplica siguieron con sus movilizaciones ante la sede de Hacienda. Y también se repiten las que protestan en la Praza do Ferro de Ourense por la situación penitenciaria de varios presos.

Las cuestiones sanitarias son otros de los asuntos que más llevan a protestar a los trabajadores o usuarios del sector. En O Barco de Valdeorras hubo concentraciones ante el Hospital Comarcal para solicitar la retirada del anteproyecto de modificación de la Ley de Saúde de Galicia. Las concentraciones para mostrar su rechazo a la congelación salarial motivaron hasta seis comunicaciones de actos reivindicativos celebrados ante los hospitales de Verín, O Barco o el CHUO. Los policías locales de Ourense fueron otro de los colectivos que salieron a la calle por quejas laborales, pero también otros cuerpos están protestando últimamente para exigir una equiparación salarial entre todas las policías de España. En este caso, hoy habrá una recogida de firmas promovida por Jusapol, colectivo que propugna la igualdad salarial entre policías nacionales y guardias civiles con los funcionarios de cuerpos autonómicos.

Las convocatorias descienden respecto a los picos del 2013 y 2014, con el doble de actos

En la última junta local de seguridad del Concello de Ourense se constataba un ligero aumento de las manifestaciones a lo largo de este año y menos concentraciones que el año pasado. Las estadísticas del 2016 cerraron el año en este capítulo con 241 movilizaciones a nivel provincial. En todo caso, siguen bajando el número de convocatorias respecto a la actividad registrada en los años 2012, 2013 y 2014. En estos dos últimos ejercicios hubo más de 400 actos cada año. Fueron, en todo caso, los de mayor número de concentraciones de toda la década. En el 2015, el número ya bajó a 360 convocatorias y el descenso siguió el año pasado. A falta del cierre completo del 2017, la tendencia -con 205 citas contabilizadas hasta diciembre- parece seguir el mismo rumbo a la baja.

Además de cuestiones locales, en Ourense hubo manifestaciones por asuntos genéricos o nacionales, como a favor de la independencia o del referendo de Cataluña, en apoyo a Juana Rivas -la mujer que mantuvo un conflicto judicial con su marido por la custodia de los hijos- en solidaridad con Venezuela, con los afectados por los incendios de Portugal o contra el maltrato animal. En algunos casos, las motivaciones generales tuvieron una significación después local, como las concentraciones contra la utilización de los animales en los festejos populares que se llevaron a cabo en Allariz en protesta por la Festa do Boi o la marcha celebrada en la ciudad después de los incendios forestales del mes de octubre. En Xinzo hubo protestas contra la tala de árboles.